Mérida, Yucatán.- La cúpula empresarial de Yucatán plateó hoy que se dé marcha atrás a la implementación obligatoria del esquema de facturación electrónica 3.3., que deberá entrar en vigor el 1 de diciembre próximo, y se permita continuar el esquema 3.2.
En un posicionamiento, la iniciativa privada en el estado advirtió que la disposición de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) podría derivar en cierre de empresas y cuantiosos gastos que se requieren para hacer competitivos los negocios.
Alertó sobre el impacto que el cambio tendría en los contribuyentes, tanto personas físicas como personas morales, pero en particular en pequeños establecimientos.
PRONUNCIAMIENTO
Respecto a la próxima entrada en vigor en el territorio nacional de la facturación electrónica, versión 3.3, dispuesta por la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, el sector empresarial yucateco, representado en el Consejo Coordinador Empresarial de Yucatán (CCE Yucatán), manifiesta lo siguiente:
Situación actual
Actualmente y con mucho esfuerzo e inversión de recursos, las personas físicas y morales contribuyentes de todo el país emiten facturas electrónicas mediante la versión 3.2.
Sin embargo, y por disposición de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, a partir del 1 de diciembre de 2017 la única versión válida para emitir facturas electrónicas será la 3.3.
Principales cambios en relación al esquema anterior
Con la implementación de esta nueva versión de facturación, están contemplados los siguientes cambios principalmente:
• Se incorporarán nuevos tipos de comprobantes.
• Se incluirá el uso del comprobante desde el punto de vista del receptor.
• Se tendrán que unificar los catálogos y tipos de datos para Comprobantes Fiscales Digitales (CFDI) y complementos.
• El método y forma de pago se invertirá respecto de la versión vigente, es decir, la 3.2.
• Los conceptos de facturación deberán tener una clave de producto o servicio y una unidad de medida estandarizada.
• Se incluirán por cada concepto sus descuentos e impuestos aplicables.
• La serie y folio se integrará a la cadena original.
Dificultades para la implementación de estos cambios
Los cambios que contempla la versión 3.3. para emitir facturas electrónicas, significarán una mayor carga administrativa para los contribuyentes, tanto personas físicas como personas morales.
Nuevamente, las empresas se verán obligadas a destinar recursos económicos para la adquisición del equipo de cómputo, software y contratación de capacitación especializada que les permitan cumplir con estas disposiciones fiscales, en lugar de invertir sus recursos, en muchísimos casos insuficientes, en mejorar o innovar sus productos y servicios, y ser más competitivas.
Cumplir con la codificación de los artículos, uno de los principales cambios que vendrán con la versión 3,3., será más que complicado para muchas empresas por la cantidad de productos que comercializan y por la laboriosa y extenuante labor de la codificación a 8 dígitos y lo extenso del catálogo.
Con el establecimiento del CFDI complemento de pagos en operaciones a crédito, se multiplicará el timbrado de los CFDIs, ya que no solamente se timbrará la factura de venta sino también cada comprobante de pago relativo a dicha factura.
El esquema de facturación es el mismo para las empresas más grandes como para los negocios más pequeños, lo cual resulta incongruente.
Para muchas microempresas que no están familiarizados del todo con el uso de los equipos de cómputo ni con el Internet, y que poco a poco lo han ido haciendo a partir de que se implementó el uso de la facturación electrónica, estos cambios pueden originar el cierre de sus establecimientos al no poder cumplir con los nuevos requisitos de la facturación electrónica por carecer de la estructura administrativa, de equipamiento e infraestructura mínimas, que les permitan solventar estos cambios.
En general la adopción de los nuevos requisitos requerirá mayor tiempo para la elaboración de las facturas ya que se tendrán que solicitar más información al cliente, lo que por sí solo afecta la eficiencia de las empresas y, por ende, repercute en un mayor costo en sus operaciones de compraventa.
Propuesta empresarial
Con base a lo anteriormente expuesto y considerando el daño que causarán a las empresas los cambios en la facturación electrónica, el sector empresarial organizado en Yucatán rechaza la facturación electrónica con la versión 3.3 y, respetuosamente, propone a las autoridades fiscales correspondientes que den marcha atrás a la implementación obligatoria del esquema de facturación electrónica 3.3. y permitan que las empresas puedan continuar emitiendo facturas mediante el esquema de facturación 3.2, dados los complejos mecanismos para la codificación de los productos de acuerdo a un catálogo de casi 53,000 productos, así como al establecimiento del complemento de pagos para las operaciones a crédito pagadas en una sola exhibición que ocasionarán un doble timbrado en la facturación de la operación, adicional al incremento de los múltiples requisitos que conlleva el nuevo esquema de facturación electrónica 3.3.
Mérida, Yucatán, a 4 de septiembre de 2017.
CONSEJO COORDINADOR EMPRESARIAL DE YUCATÁN
CCE YUCATÁN
