Según David Meade, un astrónomo cristiano, el planeta Nibiru se acerca inevitablemente a la Tierra, y el mundo llegará a su fin el 23 de septiembre de 2017.

Este astrónomo dice basarse en la numerología de la Biblia.

La enorme masa del planeta podría ser la razón, según David, de los últimos desastres naturales de los que hemos sido testigos durante agosto y septiembre, desde el imponente eclipse solar en Estados Unidos hasta el huracán Irma, pasando por el terremoto en México y más huracanes como José y María.

Nibiru es un planeta de una potente intensidad magnética cuya existencia no ha sido confirmada por los científicos pero que se ha ganado el favor de las teorías conspirativas, según las cuales podría vagar por el espacio.
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Las ‘pruebas’

Desde que Meade soltó esta ‘teoría’, en internet proliferan videos sobre el tema, e incluso en páginas web evangélicas que hacen referencia a la Biblia. En concreto del libro del Apocalipsis 12:1-2.

“Apareció en el cielo una gran señal: una mujer vestida del sol, con la luna debajo de sus pies, y sobre su cabeza una corona de doce estrellas. Y estando encinta, clamaba como dolores de parto, en la angustia del alumbramiento”, dice el pasaje.

Meade afirma en The Washington Post que “el 23 de septiembre de 2017, justamente la Luna estará justo debajo de la constelación de Virgo, a sus pies, y que el Sol se situará de tal forma que parezca que está vistiendo a la constelación”.

El astrónomo cree también que la Biblia oculta una numerología que acabará con la Tierra. “Jesús vivió 33 años. El nombre de ‘Elohim’, como llaman los judíos a Dios, se menciona en la Biblia 33 veces”, dice Meade, y recuerda que el eclipse solar que tuvo lugar el 21 de agosto cumplirá 33 días el próximos 23 de septiembre.

Así que el hecho de que los científicos sí que hayan confirmado que el eje de la Tierra se haya desplazado siete pulgadas desde el año 2000, unido a las últimas catástrofes naturales -incluso a los ensayos nucleares de Corea del Norte, según algunos medios-, podría ser suficiente para que tengas que cancelar tus planes de fin de semana (otra vez).

La NASA lo niega

‘Si Nibiru colisionase contra la Tierra el 23 de septiembre, ya lo tendríamos encima’, señala tajantemente David Morrison, científico de la NASA.

“[El planeta] sería fácil de ver a simple vista. Si estuviese ahí fuera, lo podrías ver. Todos podríamos verlo. Si Nibiru fuese real y fuese un planeta con una masa considerable, ya estaría influyendo en las órbitas de Marte y de la Tierra. Veríamos cambios en esas órbitas debidos a un objeto entrando en el Sistema solar”, dice Morrison en un video.

Morrison subraya que “no, existe tal cosa como Nibiru” y que “no, no colisionará contra la Tierra”.

Pero no será hasta ese día, el 23 de Septiembre, que sabremos si David Meade tuvo razón o no.

(Vanguardia.com.mx)