Mérida, Yucatán.- Una iniciativa para reformar la Ley de Tránsito y Vialidad del Estado de Yucatán que implique la eliminación del reemplacamiento de automotores y los cobros respectivos, presentó hoy el grupo parlamentario del Partido Acción Nacional (PAN) ante el pleno de de la actual legislatura estatal.
La diputada Beatriz Zavala Peniche anunció en tribuna la propuesta de modificar los artículos 24 al 28 de la referida ley, que implicaría eliminar dicho trámite por considerar que “es falsa medida para sostener la seguridad del estado”, ya que, dijo, existen otras alternativas para ello.
Durante la sesión ordinaria del Congreso, a la que asistieron profesores sindicalizados, periodistas y ciudadanos en general, que expresaron su respaldo a esa iniciativa, la legisladora panista aseveró que el proceso de reemplacamiento que impulsa el gobierno del estado es lesivo para la economía de las familias yucatecas.
Mencionó que en el estado de Aguascalientes el precio por reemplacar es de 540 pesos; en Nuevo León 547 y Veracruz, 638, en tanto que en otras entidades federativas del país, ya no existe ese proceso como son los casos de la Ciudad de México, Estado de México y Guanajuato que disponen de una amplia circulación de vehículos.
Recordó que en Yucatán el precio por reemplacar es de aproximadamente 1,500 pesos por unidad. El costo por cada juego de placas es menor de lo que hoy se cobra, recalcó Zavala Peniche, quien mencionó además que el nuestro es uno de los estados donde más alto se cobra al respecto.
De acuerdo con datos del Gobierno del Estado, ya cambió placas el 78 por ciento del padrón vehicular, es decir 407 mil 688 unidades que representaron ingresos por más de 360 millones de pesos, ello, tras concluir la promoción de cero recargos y multas para ese trámite del que faltan aún 115 mil 312 unidades por hacer el canje.
Al respecto la diputada del PAN demandó información sobre el destino que tendrán dichos recursos. Queremos claridad y transparencia para saber en qué se aplicarán esos montos, remarcó la diputada local al tomar la tribuna en el renglón de asuntos generales.