Cancún, Quintana Roo.- La zona urbana del principal destino turístico del país continúa con cifras negativas en materia de seguridad, con 88 ejecuciones en lo que va de este año, más de uno al día.
Del calendario han transcurrido 81 de los 365 días, y las muertes violentas atribuidas al crimen organizado no cesan, a pesar de los discursos de las autoridades de los tres órdenes de Gobierno.
Hasta el 28 de febrero los muertos con arma de fuego y huellas de violencia sumaban 65.
Mientras enero es el más violento con 38 homicidios de ese tipo, febrero cerró con 27, casi uno diario.
De continuar con esta tendencia, 2018 cerraría con más de 500 ejecutados, en contraste con los 227 del año anterior.
Remberto Estrada Barba, actual presidente de Benito Juárez, ya tiene el “título” del alcalde con el mayor número de ejecuciones en una administración, con 315, a pesar de que sólo lleva 18 meses y busca una reelección por tres años más.
Con ello dejó atrás a Paul Carrillo de Cáceres, quien en su gestión (2013-2016) sumó 107 muertes atribuidas al crimen organizado.
Apenas el 19 de marzo se contabilizaron cuatro ejecuciones más en tres municipios de la zona norte de Quintana Roo, la más conflictiva hasta el momento, además de otros tres lesionados.
El martes, otra persona fue ejecutada y cuatro más resultaron heridas con arma de fuego.
El 21 de marzo un vendedor ambulante de comida fue asesinado en Cancún y otro más también sobrevivió a las balas
En tanto, la madrugada de este jueves un joven, al parecer menor de edad, fue asesinado de un balazo en la cara.
(Gonzalo Zapata)