Por Adela Mac Swiney González

Tenerife, España.- La producción colombiana “Virus tropical”, ópera prima de Santiago Caicedo y adaptación de la novela gráfica homónima de Power Paola que ha sido nombrada como la “Persépolis latinoamericana”, ganó el premio a mejor largometraje de la II edición de los Premios Quirino de la Animación Iberoamericana.

La gala de premiación de los ganadores de esta segunda edición del certamen iberoamericano de animación tuvo lugar en el auditorio de Tenerife, isla española frente a las costas de África, construido por el arquitecto Santiago Calatrava.

Producida por Timbo Estudio y realizada en 2D y cut out en blanco y negro, “Virus tropical” es un “coming of age” protagonizado por Paola, una niña que crece entre Cali y Quito en el seno de una familia atípica.

La película ya tuvo un extenso recorrido por festivales internacionales, incluyendo la Berlinale, el Festival de Annecy y BAFICI, entre otros.

En entrevista, Caicedo señaló que la película ha estado ya en más de 70 festivales no solo dedicados a la animación “y era un reto que nosotros teníamos como contadores de historias independientemente de cual fuera la técnica, ha ganado muchos premios pero además nos ha abierto muchas puertas para nuevos proyectos, lo cual es importante”.

Afirmó que estar en la II edición de los Premios Quirino ha sido muy especial, “porque aquí nos encontramos los que estamos trabajando en las mismas condiciones de producción, ya que el mundo de la animación iberoamericano es muy particular sobre todo por las condiciones económicas y los recursos que tenemos para producir”.

Feliz de haber ganado el premio al mejor largometraje de animación, sostuvo que “este es un lugar donde no solo nos reconocemos entre nosotros para aliarnos y obtener las fuerzas para llevar a cabo nuevos proyectos, sino que también hacemos una especie de terapia de grupo para ayudarnos”.

Por su parte, la serie brasileña “Irmão do Jorel – Seja Brócolis!” de Juliano Enrico (Copa Estudio) ganó el premio en su categoría. Orientada a público infantil y coproducida con Cartoon Network, se trata de la primera animación original que el canal realizó en América Latina.

Realizada en 2D y cut out, la serie sigue las aventuras cotidiana del hermano de Jorel, un niño de 9 años que vive con su excéntrica familia integrada por padre, madre, tres hermanos, dos abuelas y un perro.

En la categoría de cortos el ganador fue el brasileño “Guaxuma” de Nara Normande, una obra documental en “stop motion” que combina arena y puppets, entre otros elementos, para contar una historia sensible e íntima. El trabajo es producido por la brasileña Vilarejo Filmes y la francesa Les Valseurs y está teniendo una intensa circulación por certámenes de todo el mundo, incluyendo Annecy, IDFA, Ottawa y Clermont Ferrand.

Otras seis producciones fueron reconocidas en la gala de los Premios Quirino: las españolas “Patchwork” de María Manero, “La increíble historia del hombre que podía volar y no sabía cómo” de Manuel Rubio y “Black is Beltza” de Fermín Muguruza ganaron como mejor cortometraje de escuela, mejor animación de encargo y mejor diseño de sonido y música original, respectivamente.

Asimismo, la argentina “Belisario – El pequeño gran héroe del cosmos” de Hernán Moyano se alzó con el reconocimiento a mejor obra innovadora; la chilena “La casa lobo” de Cristóbal León y Joaquín Cociña el premio a mejor desarrollo visual y la coproducción entre Chile, Brasil, Colombia y Argentina “Puerto Papel – La vida de los otros” recibió el premio a mejor diseño de animación.

El jurado internacional estuvo integrado el director y guionista Alê Abreu, la directora de arte de personajes de Pixar Deanna Marsigliese, el productor Gustavo Ferrada, la directora de ventas de Sola Media Barbie Heusinger y la jefa de desarrollo de Xilam Animation Marie-Laurence Turpin.

En esta segunda edición de los Premios Quirino se postularon 244 obras desde 16 países, entre ellos México, de las cuales 25 optaban como finalistas en las nueve categorías de los galardones.

(Comunicado)