Por Jesús Mejía

Mérida, Yucatán.- Propietarios de pequeños restaurantes, músicos y comediantes lanzaron un llamado de auxilio para que les permitan trabajar y obtener ingresos ante el inminente colapso de sus actividades.

A nombre de diversos establecimientos, que no están afiliados a la Cámara Nacional de la Industria Restaurantera y Alimentos Condimentados (Canirac), Edgar Miranda Morales expuso que las medidas para contener al Covid-19 han provocado desplome de sus ventas entre un 80 y 90 por ciento.

Desde el Mesón Yucateco, urgió flexibilidad de las autoridades sanitarias, ya que –dijo– muchos de estos negocios ya cerraron e, incluso, algunos “de abolengo” como la Susana Internacional, Nicté-Ha y Colonos ya quebraron o están en proceso de desaparición definitiva.

Acompañados de otros independientes, solicitó autorización para operar cuando menos los fines de semana (sábados y domingos), que son los días de mayor venta.

En conferencia de prensa, propusieron que se restablezca la licencia para expender alimentos con cervezas con el objetivo de que puedan comenzar a recuperarse económicamente.

Por separado, refirieron que la grave crisis en el sector ha derivado, además, en la pérdida de empleos y de proyectos de emprendedores.

Por ello, pidieron una reunión con el gobernador Mauricio Vila Dosal para plantearle el problema y buscar alternativas para subsistir.

Geny Magdalena Falla Alcocer, Fernando Antonio May Herrera, Manuel Herrera Barrera y Mónica Martínez se sumaron a este clamor.

En representación de la llamada industria del entretenimiento, actores, cantantes, músicos y bailarines, el comediante Johnny Cantarell comentó que este giro fue el primero en parar y va a ser el último en reactivarse, si no hay apoyo oficial.

Advirtió que entre ocho mil y 10 mil personas laboran en los “botaneros”, considerando a quienes se dedican al quehacer escénico, grupos musicales, payasos, magos y mariachis.

Éstos no han recibido ayuda gubernamental –aseguró– y su situación es crítica, de tal suerte que la mayoría no dispone para lo básico.

Citó que conoce actores, músicos y comediantes que han tenido que ocuparse de albañiles u otros oficios para sobrevivir.

La cancelación de eventos sociales como 15 años, graduaciones y bodas ha afectado de manera grave, puntualizó.

(LectorMx)