Mérida, Yucatán.- Asediada como nunca antes por varios huracanes durante 2020, el año récord de más ciclones con nombre, la Península de Yucatán inicia este 1 de junio la temporada 2021 con prácticamente “todo en contra”.

  1. Para empezar, los pronósticos no son esperanzadores: todos apuntan a un periodo con cifras arriba del promedio para la cuenca del océano Atlántico, que hoy es de 15 sistemas en 2021; los expertos coinciden en que habrá por lo menos entre 14 y 15. En cuanto al máximo, algunos pronostican 19 y otros 20, o sea, tampoco hay mucha diferencia.
(Pronóstico de la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica (NOAA, por sus siglas en inglés)

  1. Las condiciones climáticas apuntan no sólo a que los pronósticos se cumplan sino a que puedan rebasarse o que los ciclones sean más fuertes; la temperatura promedio del océano está por arriba de lo normal y “El Niño” se encuentra en fase neutral; además, se prevé que “La Niña” reaparezca durante el periodo de ciclones. Ambos factores “impulsan” la mayor actividad ciclónica.
  1. Una de las “barreras” naturales no estarán presentes en 2021 como en años anteriores; hablamos específicamente del polvo (o la arena) del Sahara, uno de cuyos efectos es “secar” el ambiente e inhibir la formación de ciclones tropicales. De acuerdo con la Administración Nacional de Aeronáutica y el Espacio (NASA, por sus siglas en inglés) se prevé uno de los años “más pobres” en “viaje” de “nubes de polvo” del desierto. Por cierto, el año pasado, fue históricamente el más intenso para muchas regiones del mundo incluida la Península de Yucatán.

  1. El nivel de agua del manto freático en Mérida y la zona norte del Estado, que el año pasado también rompió récord al superar los 5 metros sobre el nivel medio del mar (msnmm); esto hizo que el subsuelo “rebosara” tras la prominente temporada de lluvias y ciclones. El principio del problema fue la tormenta tropical “Cristóbal”, que bañó la región por más de 38 horas seguidas, en junio. “Gamma” y frentes fríos propiciaron el rebose, en octubre.
    Actualmente,  está en 2.75 msnmm y está subiendo, según el reporte de Juan Vázquez Montalvo, especialista en meteorología. El problema principal es que la temporada de lluvias, aunque no ha dejado grandes acumulaciones en Mérida, sí lo está haciendo en la costa, sitio en el que normalmente “desemboca” naturalmente el agua del subsuelo de otras partes de la entidad.

Ahí, al “llenarse” de agua la salida, se forma un “tapón” que impide que el líquido del freático se “derrame” en el litoral. Si llueve fuerte en Mérida, las zonas que se inundaron el año pasado, volverán a llenarse de agua, advierte Vázquez Montalvo.

Así, con estos factores en contra, Yucatán -y toda la región peninsular- deberá enfrentar una nueva temporada de ciclones que se moverá en medio de un mar agitado debido a las favorables condiciones para la formación de estos “meteoros climáticos”.

La temporada de huracanes concluye “oficialmente” el próximo 30 de noviembre de 2021.

Infografía TC2020
Pronóstico del Servicio Meteorológico Nacional (SMN)

Recomendaciones en caso de huracán

Ante la amenaza de un ciclón tropical, debemos hacernos la pregunta:  ¿mi casa es segura?

No es si…

  • Es de madera y techo de lámina.
  • Se inunda por estar en zona baja, en ciénaga, zona pantanosa  o costera o por estar cerca de la playa.

¿Qué hago?

  • Determinar dónde pasaré el ciclón: casa de un pariente o de un amigo o un albergue
  • Definir cómo voy a llegar esta el lugar donde me refugiaré: medios propios o apoyo del Gobierno.
  • Cerrar la casa, bajar el interruptor de luz, desconectar aparatos, cerrar los tanques de gas y asegurarlos lo más posible.
  • Guardar todos los bienes materiales que pueda en los lugares que considere más seguros.
  • Meter a una bolsa de plástico documentos importantes, toalla, cepillo de dientes, mudas de ropa, artículos personales indispensables, medicamentos de control .
  • Meter a nuestras mascotas en cajas especiales para ello y para su transporte.

Es importante tomar en cuenta que, a estas alturas, ya debe estar listo el plan de contingencia familiar, empresarial o institucional. Si no está, ¡ya es hora de concluirlo!

Fuente: Comité Institucional para la Atención de Fenómenos Meteorológicos Extremos (Cifame)