Ciudad de México.- La creación de un grupo de trabajo federal entre el Ejecutivo y el Legislativo para atender la crítica situación de las abejas y de los apicultores, propuso el senador por Yucatán, Jorge Carlos Ramírez Marín.

Ante los “graves y variados problemas” en ese renglón, planteó a la secretaria de Economía, Raquel Buenrostro, riesgos y desafíos por los que atraviesa este insecto polinizador y vital para la vida en el planeta, así como las afectaciones a las familias que se dedican la apicultura.

“Es imprescindible luchar a favor de los productores que están sufriendo la baja en los precios y las condiciones de los compradores internacionales”, dijo.

1) La falsificación: Jarabes de fructosa inundan los mercados, con la etiqueta de miel.

2) La promesa de centros de acopio, por parte el presidente Andrés Manuel López Obrador, “no ha caminado con la velocidad que se requiere”.

3) Que los tres órdenes de gobiernos incluyan en sus compras de despensa a la miel, lo que significaría “una aportación multimillonaria a los productores locales y, si bien, la miel es más cara que la azúcar, nadie puede negar su valor nutricional”.

El legislador pidió que la Norma Oficial Mexicana reconozca al dulce que producen las abejas autóctonas, las meliponas, como miel, ya que, actualmente, esta es referida en la ley como jarabe, lo que dificulta su venta y exportación y afecta en el costo de su comercialización.

Además, expuso que en Yucatán –uno de los principales productores de miel de todo el país– los apicultores enfrentan contaminación del agua, deforestación, utilización de plaguicidas que matan a las abejas, altas temperaturas e incendios forestales.

“En Yucatán hay más de 12 mil personas que se dedican a la apicultura, la gran mayoría son mujeres, pero en muchos casos son familias enteras que dependen de la actividad”, apuntó.

El grupo de trabajo federal, según su solicitud, reforzaría la parte normativa y blindaría mejor al sector apicultor del país.

(Con información de comunicado)