Por Adela Mac Swiney González

Madrid, España.- La organización conservacionista World Wildlife Fund (WWF) advirtió hoy que solo queda el 10 por ciento de leones africanos, dejando a la especie a un paso de estar en peligro de extinción, destacando su papel fundamental como uno de los mayores depredadores, en el mantenimiento de poblaciones sanas de herbívoros, como cebras o jirafas, y del equilibrio de la biodiversidad del continente africano.

En el marco del Día Internacional de León, que se celebra hoy, la ONG apuntó que en un siglo se ha perdido el 90 por ciento de los leones africanos y se han extinguido en 26 países. En los últimos 25 años el número de leones salvajes africanos se ha reducido a la mitad.

Indicó que sus mayores amenazas son la pérdida de hábitats, la falta de alimento y la competencia con el ser humano por las presas silvestres, así como los conflictos con ganaderos, la caza furtiva y el tráfico y comercio ilegal.

España es uno de los actores europeos más destacados en las rutas internacionales del tráfico de fauna y flora. WWF España desarrolla su campaña “Stop tráfico de especies” desde 2017 con el objetivo de implicar a la sociedad en la lucha contra este crimen contra la naturaleza.

La organización no gubernamental expuso que este gran félido está protegido e incluido en la Lista Roja de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN) con la categoría “vulnerable”, el paso previo a estar “en peligro de extinción”. A medida que crece el control sobre el tráfico de animales como el tigre o el elefante, surgen nuevas víctimas como el león.

“Estos majestuosos animales son perseguidos, envenenados, trampeados, cazados para ser vendidos en mercados clandestinos para la comercialización de sus cráneos, pieles, dientes o su grasa, así como sus garras como elementos de bisutería. Además, en algunos países asiáticos se elabora vino con huesos de león como símbolo de estatus social”, señaló.

Resaló que el tráfico de especies es equivalente al de drogas y armas, pero mucho menos arriesgado y perseguido a pesar de que genera un impacto social y económico similar, además del correspondiente impacto sobre la biodiversidad. Elefantes, tigres y rinocerontes son sus principales víctimas, aunque son miles las especies de fauna y flora afectadas por un comercio criminal que mueve entre 10 y 20 mil millones de euros al año.

(LectorMx)