Con caída de 1.99% el día de ayer, a 26.54 dpb, la mezcla mexicana se mantiene en mínimo técnico de 7 años

México.- El precio del crudo mexicano se encuentra a 31 centavos de igualar el soporte técnico de 26.23 unidades, por lo que se mantiene en el rango de mínimo de siete años, de traspasar ese escalón caería al menor nivel en 11 años.

En el cierre de este lunes, la mezcla descontó la subida del viernes que ganó por factores cambiarios y se alineó a los precios internacionales con un descenso de 1.99 por ciento, o 54 centavos, al concluir en 26.54 dólares el barril.

En la sesión, el Brent marcó un mínimo de 11 años al caer a los 36.35 dólares, con un declive de 1.44 por ciento, en sentido apuesto, el WTI logró un ínfimo avance de 1 centavo a 35.74 unidades, en tanto, los crudos asiáticos reportaron números rojos.

En este momento, el vender Pemex un barril de petróleo en el mercado internacional le está reportando pérdidas, según un estudio de Rystad Energy que pone el tonel mexicano con un costo de 29.10 dólares, es decir, un perjuicio de 2.56 dólares por cada contenedor negociado.

Se debe recordar que el barril de la petrolera mexicana no tiene coberturas, ya que éstas sólo tenían vigencia del 31 de diciembre de 2014 al 30 de noviembre de este año, por lo que si el estudio es correcto en referencia al costo de producir, estaríamos frente a pérdidas en los ingresos de Pemex, debido a que se estaría vendiendo por debajo de lo que cuesta obtener un barril.

AGUAS PROFUNDAS, EL RETO PETROLERO PARA 2016

La cuarta fase de la Ronda Uno marcará el progreso de la reforma energética para el siguiente año, pues el éxito de esta licitación implicará inversiones y producción petrolera mucho mayores que las anteriores tres juntas, explicaron analistas del sector.

“En el fondo la reforma energética se hizo para explotar los vastos recursos no convencionales de México, por lo que el anuncio de la cuarta fase es el más importante hasta ahora en este proceso”, afirmó Pablo Medina, analista en materia de hidrocarburos, de la consultora internacional Wood Mackenzie.

(Vanguardia)