Mérida, Yucatán.- Las mujeres tienen la mayor carga total de trabajo, ya que por cada 10 horas que ellas laboran, los hombres lo hacen en 8.3 horas, esto de acuerdo con indicadores del año 2014, informó el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) a propósito este ocho de marzo del Día Internacional de la Mujer.
En este tema de la sobrecarga de trabajo femenino en relación con los varones, el organismo consideró pertinente tomar en cuenta la suma del trabajo no remunerado destinado a las labores domésticas y de cuidados del hogar con relación al empleo remunerado realizado en la esfera del mercado laboral.
De las dos mil 930 millones de horas de trabajo total a la semana registradas en el referido año, las mujeres absorbe el 54.7 por ciento, es decir, trabajan más que los hombres y son, por cierto, menos remuneradas en más de un 20 por ciento.
Las integrantes del sexo femenino trabajan 20.6 por ciento más horas que los hombres, en tanto que el 65 por ciento de su trabajo total se integra por labores no remuneradas en el hogar y el 32.3 de su labor se destina al trabajo remunerado.
En contraste, los hombres se orientan principalmente a las labores remuneradas con 73.9 por ciento de su trabajo total, asignando a las funciones domésticas y de cuidados sólo 22.8 por ciento. En ambos casos, el tiempo restante corresponde al trabajo no remunerado en la producción de bienes de autoconsumo del hogar (2.7 por ciento mujeres y 3.3 por ciento hombres).
Es importante precisar, que en el año 2014 las mujeres cubrieron el 77.5% del total de las horas destinadas a labores domésticas y de cuidados no remuneradas; lo que en algunos casos representó una segunda jornada laboral, cuando la mujer tuvo un empleo remunerado.
Cada mujer realizó el correspondiente a 47 mil 400 pesos netos anuales por su trabajo en labores domésticas y de cuidados no remuneradas. Este valor cambia cuando se considera el lugar de residencia, pues las que viven en hogares rurales generaron un valor económico promedio de 51 mil 808 pesos.
Por otro lado, si la mujer está casada o vive en unión libre su aportación ascendería a 61 mil 456 pesos; mientras que las labores domésticas y de cuidados no remuneradas de quienes están solteras tendrían un valor similar a 26 082 pesos.
En contraste, las mujeres que habitan en hogares con presencia de menores de seis años aportaron en promedio 60 mil 628 pesos, principalmente por sus actividades de cuidados y apoyo.
En el año 2014, el valor económico de las labores domésticas y de cuidados fue de 4.2 billones de pesos (a precios corrientes), lo que equivale a 24.2 por ciento del Producto Interno Bruto del país.
De esta estimación económica el trabajo no remunerado de las mujeres asciende a 3.1 billones de pesos a precios corrientes en 2014, cifra equivalente a 18 por ciento del Producto Interno Bruto en ese periodo.
(Jesús Mejía)