Mérida, Yucatán.- El Arzobispo de Yucatán, Gustavo Rodríguez Vega, se solidarizó hoy con el pueblo que sufre por los efectos de las medidas económicas en el país y apoyó las manifestaciones pacíficas para reclamar a las autoridades.
“Nos preocupa lo que está viviendo todo nuestro pueblo y nosotros junto con el pueblo, porque el gasolinazo en sí mismo es algo que duele mucho a la economía del país, pero que además traerá lamentablemente un alza generalizada de precios.
“Esperemos que se reconsidere o que se busquen medios alternativos para fortalecer la economía sobre todo de la gente más pobre”, dijo en entrevista, tras una reunión con reporteros con motivo del Año Nuevo y por el Día Nacional del Periodista.
Monseñor Rodríguez Vega compartió consideraciones del Cardenal y Arzobispo de Guadalajara, José Francisco Robles Ortega, presidente de la Conferencia del Episcopado Mexicano.
“Comprendemos todo lo que está viviendo nuestro pueblo, estamos a favor de las manifestaciones que se han dado pacíficamente, y ojalá que todas las manifestaciones sean igualmente pacíficas; el saqueo, la violencia, lo reprobamos, no conduce a nada más que a hacer daño a las personas.
“No se justifica. Si fuera gente hambrienta robando comida, bueno, pero si están robando plasmas, electrodomésticos, los celulares, eso no es por necesidad, eso es solamente por hacer maldad o por aprovechar el río revuelto. Eso no tiene ninguna justificación, es un mal uso de las redes sociales”, abundó el representante de la Iglesia católica en Yucatán.
A pregunta expresa, señaló que hasta ahora no hay una satisfacción sobre las medidas que está tomando el gobierno federal.
“No se ve claro qué se vaya a hacer en forma alternativa para paliar un poco esta debacle económica, entonces quisiéramos ver acciones claras, concretas, contundentes, que pues de alguna manera alivien o definitivamente dar marcha atrás al gasolinazo”, expuso.
Previamente en su discurso, criticó el saqueo y vandalismo ocurridos en estos días y que, apuntó, han sido organizados desde las redes sociales.
“No salieron de la casualidad”, puntualizó.
En el Centro Comunitario de la Parroquia de Itzimná, convocó a los ciudadanos a participar, pero de una manera positiva.
Además, pidió permanecer atentos y con cuidado con lo que ven en las redes sociales, a las que definió como “un arma de doble filo” que puede ser utilizada para bien o para mal.
“Si las redes provocan violencia no es algo bueno, si provocan algo que sea positivo para llamar la atención de nuestro gobierno en sentido de nuestra insatisfacción, adelante, pero organizados y en paz”, insistió.
También valoró que los comunicadores y periodistas deben de contribuir a que la sociedad se organice y se cohesione.
“Que nadie crea que las cosas van a venir a arreglarlas del cielo o que va a venir a arreglarlas un nuevo presidente que traerá siempre las mejores intenciones y soluciones. El mejor desarrollo de los pueblos se da siempre con la participación de todos y los medios de comunicación pueden estimular la participación ciudadana”.
El prelado estimó que los noticieros y los medios de comunicación deben de hacer un esfuerzo por comunicar siempre buenas noticias.
“No se pueden ocultar las malas noticias, hay que darlas a conocer; hay que buscar el modo de equilibrar para dar a conocer también otras noticias positivas”, recomendó.
(LectorMx)
