Mérida, Yucatán.- Bajo el nuevo esquema de precios sin tope en las gasolinas, las estaciones de servicio en Mérida no ofrecieron mejores precios que los que ya había, aunque los consumidores tampoco se percataron de que las gasolinas ya tenían precios diferentes según la empresa que las opera.

Si quieres conocer los precios actualizados a febrero de 2018, entra aquí: Magna rebasa $17 por litro

La mayoría de los distribuidores subió sus precios, aunque en unos cuantos centavos, con respecto al último registrado y autorizado por la Secretaría de Energía (SE), de este 29 de noviembre, que fueron de 17.28 para la Premium, 15.58 y  15.58 pesos para la Magna.

Lo que sí pudo observarse durante un recorrido matutino por varias estaciones del poniente de la ciudad es que las gasolineras ya mostraban precios distintos, aunque las diferencias no rebasaban los dos centavos, una diferencia que sólo puede notarse si se cargan grandes cantidades, por ejemplo, para flotillas o vehículos de transporte.

Como informamos, este 30 de noviembre quedaron liberados los  precios de las gasolinas en casi todo el país, y los únicos estados que mantuvieron el control de los precios máximos fueron Quintana Roo y Campeche; desde el primer minuto  de este jueves, en Yucatán los precios los establecen las empresas que operan las gasolineras.

De las 10 estaciones de servicio visitadas, la mayoría subió sus precios en comparación con el 29 de noviembre, y lo ubicaron, en promedio, en 17.30 pesos por libro la Premium, y 15.60 pesos la Magna; sin embargo, hubo algunas que ofrecían, aunque por un centavo, precios más bajos: 17.29 y 15.59 pesos, respectivamente.

Empresas que operan gasolineras que intentan “deslindarse” de la marca Pemex, como Oxxo Gas y La Gas, y que se esperaba ofrecieran mejores precios que las que operan con la marca de la paraestatal no ofrecieron ninguna ventaja para los consumidores: los precios estaban igual.

Bombas de gasolina

Algunas gasolineras de Mérida ofrecen precios más bajos que otras en Magna y Premium.

No faltó quien, incluso, estuviera por arriba de los precios “promedio”; dos de las gasolineras, antiguos franquiciatarios de Pemex, se atrevieron a subirle un centavo, y dejaron el precio en 17.31 y 15.60 para las gasolinas más usadas.

El cambio en la política de los precios pasó indavertida para la mayoría de los compradores de combustible, pues entraban, como lo hacía un día cualquiera, y pagan lo que lo que pedían sin fijarse de los precios exhibidos en las máquinas despachadoras.

En la página web de la Secretaría de Energía, los expendedores de combustible comenzaron a reportar sus precios, y en una revisión rápida pudo verse que el más alto alcanzó los 17.35 pesos  por litro en la gasolina Premium, y 15.63 pesos en la Magna.

Los más bajos fueron de 15.58 para la Magna, y de 17.29 pesos para la Premium.

Incluso en Progreso, donde este año el precio promedio fue más bajo que en Mérida, porque la descarga del combustible se hace directamente en el puerto -uno de los factores que encarece el producto es el traslado-, también subió el precio un centavo comparado con el del 29 de noviembre.

La gasolina Premium se vendió a 17.21 pesos por litro, el precio más bajo, y 17.22 el más alto; mientras que la Magna se vendió en 15.51 por litro el precio más bajo y 15.52, el más alto.

En un ejercicio simple, si usted carga gasolina en Mérida, en la estación que tiene precio más alto, o sea, 17.35 pesos por litro (la Premium), por 40 litros usted pagará 694 pesos; si carga en donde está más barata, pagará  691.60 pesos

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(EVM)