Mérida, Yucatán.- La peregrinación más importante de los católicos cada año es, sin duda, a los santuarios guadalupanos, y a pesar de que desde principios de diciembre e incluso antes, el de Mérida, la iglesia de San Cristóbal, comienza a recibir fieles, son los días 11 y 12 los más intensos.
Aunque la mayoría de los corredores prefieren guardar el secreto de su promesa, es decir, la razón por la que corren, descalzos, decenas de kilómetros, acompañados de otros fieles, comentan que lo hacen porque quieren “devolver” un favor recibido, ya sea la salud, la vida y, por qué no, el dinero, a través del trabajo.
Algunos se van, otros llegan, pero el punto de partida o de llegada es siempre el santuario de la Virgen de Guadalupe, cuya imagen no sólo es la que más se ve por estas fechas dentro y fuera del santuario sino a cuadras a la redonda, porque vendedores ambulantes e incluso tiendas de “moda” aprovechan la festejo para sacar unos pesos de más.
Desde este lunes 11, después de las 15:00 horas, se programaron misas para los llamados gremios que van llegando al santuario a dar gracias. La más importante es la de las 12:00 horas -en realidad ya del martes 12- que oficia Pedro Mena, el obispo auxiliar de la Arquidiócesis, y que marca el inicio de la vigilia y de los cánticos.
Durante 3 horas, los fieles, de motu proprio, e impulsados por su devoción, le cantan a “La Morenita del Tepeyac”, para conmemorar su aparición al indio Juan Diego, en 1531. A las 4:00 horas, de este 12 de diciembre, se le cantan “Las Mañanitas”, en esta ocasión para celebrar 486 años de llamado milagro guadalpuano.
El recién nombrado párroco de San Cristóbal, Melchor Rey Trejo Alvarado, explica que aunque la fiesta guadalupana es el día 12, desde este 11 de diciembre comenzaron a llegar, muy temprano, llegaron antorchistas para cumplir con su promesa. Dijo que muchos de los fieles pide confesarse, y que también se ofrecen misas, aunque por la mañana no son cada hora.
En total, se concelebran 24 misas, incluidas la solemne, a las 18.00 horas del 12 de diciembre, en la que el arzobispo metropolitano de Yucatán, Gustavo Rodríguez Vera, dará la indulgencia plenaria, es decir, “borra” la penitencia por los pecados que ya han sido perdonados. (Si quieres saber más sobre la indulgencia plenaria, da clic aquí)
Aunque no hay un número preciso sobre los fieles que llegan al templo, se calcula que por cada misa entran unas mil 200 personas, a partir de la que se celebra a las 20:00 horas del día 11. Un cálculo no oficial es de unas 20 mil personas sólo en las liturgias, pero son poco menos de 24 horas de ir y venir de fieles católicos.
