Mérida, Yucatán.- El arco de acceso a la ciudad que se ubica en la Avenida Internacional, frente a los terrenos del aeropuerto, luce nueva imagen y se suma a las obras realizadas por esta administración para embellecer la ciudad.

El director de Desarrollo Urbano, Aref Miguel Karam Espósitos, recordó que el arco fue construido en 1992, para celebrar los 450 años de la ciudad y no forma parte del patrimonio histórico de Mérida, pero sí es un elemento simbólico importante, ya que se ubica en el principal punto de acceso, que ahora luce impecablemente pintado de amarillo hacienda, con nuevas baldosas simuladas de piedra, así como nueva y mejor iluminación.

Recordó que desde el inicio de la administración, el alcalde con licencia Mauricio Vila se propuso dotar de mejor infraestructura turística a la ciudad por lo que en esta administración se han rescatado los arcos de Dragones, del Puente y el de San Juan. Además se ha fortalecido el programa de Mantenimiento de Fachadas del Centro Histórico, que en su primera etapa abarcó 89 predios de las calles 60 y 62 x 55 y 63 (del parque de Santa Lucía hasta la Plaza Grande), con una inversión $9 millones.

Este programa actualmente está en una segunda etapa, que incluye 228 fachadas, de las calles 60 y 62, en el tramo de la calle 47 (Santa Ana) hasta la 55 (Santa Lucía), con una inversión de $10 millones.

También se realizó la limpieza y cuidado preventivo del Monumento a la Patria, se dotó de nueva iluminación al Paseo de Montejo y de internet gratuito a esa zona, además de los trabajos en el mantenimiento del Centro Cultural Olimpo, del Palacio Municipal, y los trabajos del enverjado de la Catedral, entre otros.

El Arco de la Avenida Itzáes

Los trabajos incluyeron el cambio de los paños de recubrimiento y la colocación de baldosas en forma de piedra de cantera y la sustitución de los escudos de la Ciudad.

Además, indicó Karam Espósitos, se colocaron placas de piedra en los costados interiores (cantos) y molduras tipo capitel para conformar de mejor manera el efecto de las columnas simuladas, añadiendo detalles para mejorar el impacto visual.

También se renovó la instalación eléctrica, se desmantelaron y colocaron de nuevo las tres luminarias con que cuenta el arco para dotarla de la iluminación que tenía originalmente, se retiraron y se les dio mantenimiento a las molduras que están en la parte alta del arco, a unos cuatro metros de altura, y se cambiaron las molduras de cornisa mexicana hechas de fibra de vidrio.

Al pie del arco, en el parte del frente, se colocaron nuevas luminarias para que el arco luzca mejor por las noches.

Además, se pintó de nuevo el letrero de Bienvenida y, para que el tránsito sea cómodo y seguro, durante los trabajos se limpió y señalizó la zona, debido a que registra un paso importante tanto de peatones como de vehículos.

Debido a que no forma parte del patrimonio histórico de la ciudad, para los trabajos no se requirió la intervención del INAH, aunque las obras fueron un poco complicadas debido al intenso tránsito vehicular de la avenida.

(Comunicado)