Peto, Yucatán.- Ellen Sumire Iida, nacida en Japón y quien aprendió a hablar y cantar en lengua maya, compartió sus motivaciones y apreciaciones sobre esta lengua.
La joven dirigió un escrito al comunicador Bernardo Caamal Itzá, quien la entrevistó en febrero de 2016 al término de un foro organizado por el Programa de Inmersión Cultural (PICY), por medio del cual llegó a Yucatán.
Ellen estudia en Estados Unidos y para aprender español decidió extender su estancia en Yucatán.
Este es el mensaje textual que compartió con su interlocutor yucateco.
“Me sorprende que tanto este artículo haya circulado y que se haya difundido así por redes sociales, y la cantidad de respuestas que he obtenido en formas de comentarios.
“Cuando decidí aprender la Maya, fue por quererme comunicar con la gente de Yucatán en su lengua materna, ya que estaba viendo los límites de comunicarme en español, particularmente en contextos rurales.
“Vi un gran cambio ya que regresé a los pueblos esta vez tratando de comunicar en Maya en lugar de Español: la gente te tiene más confianza, te cuenta cosas con más soltura, expresión, y detalle.
“Pude comunicarme ahora con las mujeres y ancianos (que tienden a no hablar tanto el español como los hombres jóvenes).
“Ahora, con este artículo y la respuestas a ello, pude ver el impacto que puede tener el hecho de que un extranjero (o no-hablante) entre a la comunidades y aprenda su lengua.
“Quisiera dejar claro que respecto a muchos de los comentarios sobre ‘la vergüenza del Yucateco que no hablamos Maya por pena’, mi intención no es presionarles hablar su lengua.
“Si les da vergüenza, o no lo enseñan a sus hijos, es por una buena razón: por el temor a la discriminación y menosprecio hacía su lengua, por querer un mejor futuro y estatus para sus hijos.
“Más bien lo que hay que preguntar es porqué se tienen que sentir avergonzados, u ocultar el orgullo por su lengua materna? Eso tiene mucho que ver con la actitud de la sociedad de los no-mayahablantes.
“Para no-mayahablantes, creo que es importante en vez de echar la culpa a ‘los que lo saben pero no hablan’, tratar de mostrar respeto, valorar a todas las lenguas y culturas, y más que nada, mostrar interés y curiosidad para acercarse a los Mayas de hoy, tanto como lo mostramos hacia los ‘Mayas antiguos’ del pasado.
“Quisiera agradecer a Bernardo Caamal Itzá por crear este espacio de compartir mi experiencia, a Karla E. Peña Zapata y el equipo PICY por la oportunidad y apoyo hacer este proyecto, y a mis maestr@s de Maya oficiales y no-oficiales. Ana Patricia Martínez Huchim”, escribió la japonesa.
(Bernardo Caamal Itzá)
Japonesa hablante maya reflexiona sobre esta lengua
