Mérida, Yucatán.- Al senador Ernesto Cordero Arroyo sus compañeros de grupo le reprueban su abierto apoyo al PRI y sus ataques al candidato de la coalición “Por México al Frente” a la Presidencia de la República, Ricardo Anaya Cortés.
Su antigua aliada en Yucatán, Rosa Adriana Díaz Lizama, actual secretaria de la Mesa Directiva del Senado de la República, deploró la posición del ex secretario de Hacienda durante el gobierno de Felipe Calderón Hinojosa.
Lamentó que Cordero, quien este lunes acudió a la Procuraduría General de la República (PGR) a denunciar a Anaya por su presunta participación en una red de lavado de dinero, utilice su posición e investidura en Mesa Directiva y desde su cargo de presidente ignore la obligación de ser totalmente imparcial.
“En el caso electoral pues él debe comprender que somos uno de los tres poderes en el país que debe regirse con total respeto y apego a la ley”, puntualizó en entrevista con LectorMx.
Díaz Lizama refirió que, en esa instancia de la cámara alta, en más de una ocasión se le hizo ver a Cordero que tendría que mantener imparcialidad frente al tema electoral.
“Y en este caso, por supuesto, que me disgusta que se dirija de esa forma a nuestro candidato y bueno pues él su posición política y preferencia política tendrá igual; se le respeta, pero que no agravie el cargo que hoy ostenta en el Senado”, expresó.
La yucateca señaló que desde el momento en que Cordero tomó partido y su preferencia por José Antonio Meade, ya el electorado, el panismo ya sabe que éste “ya no pertenece a las filas del PAN”.
Por supuesto que nos damos cuenta que es un fuego amigo o así lo quiere considerar –dijo–, sin embargo, los panistas ya estamos trabajando fuerte por la campaña de Ricardo Anaya y creo que estas dos semanas que faltan serán fundamentales y vamos a ganar la elección, pese a la postura de los panistas que se fueron en su momento, los que ya no son.
De la expulsión de Cordero Arroyo de las filas del PAN –de quien fue su coordinadora de campaña por la Presidencia Nacional del blanquiazul en Yucatán en 2014 –, avaló ese procedimiento.
“Es claro, cuando una persona no solamente agravia a nuestro candidato, sino que se dice abiertamente con otro partido, debe ser baja”, asentó.
Por ello, se pronunció porque el Comité nacional u otro órgano de dirigencia del PAN tome cartas en el asunto.
“En el caso de Ernesto pues ha sido muy clara su postura de preferencia al candidato del PRI y de agravio a nuestro candidato, entonces creo que no tiene nada que hacer en el PAN”, sentenció la senadora.
(LectorMx)