Mérida, Yucatan.- Este lunes se reabrió el tránsito sobre uno de los 2 cuerpos del puente de periférico que “libra” la carretera Mérida-Progreso, y de inmediato se desahogó el cuello de botella que se formaba en el norte de la ciudad.
Aunque sólo se habilitaron 2 de los 4 carriles y sólo de uno de los 2 cuerpos del puente -el que va de poniente a oriente, llamado “interior“-, el tráfico fue mucho más fluido desde poco después de la apertura, cerca de las 07:00 horas (7 de la mañana) de este lunes 16 de julio.
El puente, el primero que se construyó en periférico, en los años 90, se cerró completamente a la circulación el pasado 10 de marzo, cuando se bloqueó la circulación en el cuerpo exterior -que corre de poniente a oriente- para continuar con las obras de ampliación que iniciaron a principios de año.
La obra empezó en enero pasado con la construcción de vialidades alternas que permitieran “intervenir” todo el distribuidor sin frenar el tránsito en la zona; una vez concluidas, se cerró gradualmente la circulación: primero el cuerpo interior y carretera Mérida-Progreso (bajo el puente) y luego en el cuerpo exterior que sube el periférico.
El objetivo de la modernización del también llamado paso superior vehicular es ampliar: de 2 a 4 carriles (3 de circulación y 1 de incorporación, sobre el puente), las “gasas” (las “subidas” y “bajadas” a periférico) y a 6 carriles (2 de circulación y 1 de incorporación, por sentido) bajo el puente para “empatarlo” con la Mérida-Progreso.
De acuerdo con la justificación de la obra, la ampliación era necesaria no sólo por la cantidad de vehículos que transita por la zona, sino porque todo el periférico es de 3 carriles por sentido y al subir el puente se ensanchaba a 2, y además los vehículos que se incorporaban en la gasa tenían que espera el paso. Todo eso, en teoría, ya se solucionó.
Adicionalmente, al circular sobre el puente, la subida y bajaba del puente eras muy pronunciadas lo que hacía un efecto de columpio; ese “error” de diseño original ya también fue modificado.
Con la apertura de los 2 carriles, se empieza un “desbloqueo” gradual que deberá completarse el próximo 15 de agosto con la entrega total de la obra, un mes antes de los previsto.
Las obras alternas que se abrieron para permitir la circulación continúan funcionando porque quienes suben el puente no pueden bajarlo: las “gasas” permanecen bloqueadas porque aún no hay circulación bajo el puente.