Mérida, Yucatán.- En respuesta a recientes acontecimientos de personas que se privan la vida en Yucatán, profesionales en diversas ramas unieron esfuerzos para organizar ayuda “de manera humana, privada y confiable”.

El “Colectivo Vida”, presentado este sábado, informó que busca prevenir y contribuir contra el creciente fenómeno de los suicidios en Yucatán.

El caso de Yarixbeth Hidalgo Cordero, de 30 años de edad y originaria del estado de Veracruz, quien luego de casi siete horas de amenazar con arrojarse desde la cima de una torre de energía de alta tensión finalmente cayó y murió en Ciudad Caucel el domingo pasado, llevó a estos ciudadanos a conformar la agrupación.

Según su propósito, ofrecerán herramientas adecuadas con las que cada integrante cuenta para dar apoyo profesional y lo necesario para implementar estrategias preventivas de intervención con el fin de evitar más suicidios o reducir su número en el estado.

En conferencia de prensa en la clínica “WellMedic”, se difundió un posicionamiento sobre el tema y la incidencia del problema en Yucatán.

Los participantes son la psicoterapeuta Yendi Cardozo, experta en gestión social; Bertha Alicia Rosado, Claudia Pérez, Raúl Romo, mediadora Areny Cobos, psicoterapeuta Víctor Chan Martín, licenciada Alicia García Gamboa, abogado Rodrigo Pinzón, suicidóloga Rita Ortiz, enlace con medios Erika Concha, Jorge Acosta, y la diseñadora Mariana Rihani.

“Somos un grupo de especialistas, asociaciones civiles y sobrevivientes que nos une la preocupación por el aumento de suicidios en la región, en particular en Yucatán.

“Estamos convencidos de que el protocolo que se implementó el domingo pasado en el triste suceso de la joven mujer puede mejorarse, el suicidio ha causado y estaì causando tanto dolor en las familias de la península de Yucatán”, leyó Chan Martín.

Los miembros del grupo expusieron que vincularán experiencias, entrenamientos y conocimientos para construir y/o fortalecer estrategias, programas, equipo de primeros respondientes en primeros auxilios psicológicos, investigaciones, protocolos y modelos de prevención e intervención, así como hacer propuestas de política pública.

El “Colectivo Vida” invitó a más personas a incorporarse en esta tarea y lanzó exhortos a las autoridades correspondientes.

1. Que se actualicen los protocolos de intervención para personas en crisis con riesgo suicida.

2. Que se conforme una Unidad Especializada para la Intervención en Crisis, esto es, la integración de un equipo de expertos en primeros auxilios psicológicos, mediación, intervención en crisis, negociación, psicoterapia, entre otros.

3. Que se realicen autopsias psicológicas y otras herramientas más de las personas que se suicidan para conocer el antes del evento y deslindar responsabilidades si hubiera victimarios potenciales y que, además, genere información importante para la intervención de futuras situaciones.

4. Que se le provea de apoyo integral a la familia (psicológico, legal, médico y de todo lo necesario) para una óptima contención que quite riesgos de traumas y estrés postraumático.

5. Que se realice un verdadero seguimiento de cada caso hasta la conclusión satisfactoria del suceso.

6. Que la buena intención y actitud humana no esteì por encima de la capacitación y el equipamiento en la intervención de las personas en crisis.

7. Que se fortalezca en presupuesto y recursos humanos a la Dirección de Salud Mental y a las Unidades de Salud en todo el estado.

8.- Que se hagan acciones permanentes para fortalecer la salud mental, emocional y relacional de las familias yucatecas.

En el escrito, incluyeron un llamado a las familias a no minimizar ni ignorar los comportamientos de riesgo de sus familiares, y a la sociedad yucateca en general pidieron no hacer burla ni risa de sucesos en donde esteì en peligro la vida e integridad de personas.

NUMERALIA

En 2021, sucedieron siete mil 818 fallecimientos por lesiones autoinfligidas en el país, lo que representa 0.7 por ciento del total de muertes en el año y una tasa de suicidio de 6.2 por cada 100 mil habitantes.

En 2018, el 5 por ciento de la población de 10 años y más declaroì que alguna vez ha pensado suicidarse.

Las estadísticas de mortalidad reportan que en 2020 hubo un aumento del 6.2 por cada 100 mil habitantes, con respecto al 2019.

La población de 18 a 29 años tiene la tasa de suicidio más alta: 10.7 decesos por cada 100 mil personas, le sigue el grupo de 30 a 59 años con 7.4 fallecimientos por cada 100 mil habitantes.

La idea suicida estaì más presente en las mujeres de 50 a 59 años, seguida por las niñas y adolescentes de 10 a 19, las mujeres de 40 a 49 años y las de 60 años y más.

En los masculinos, la idea suicida se presenta mayormente en la población de 40 a 49 años, continuado por aquellos que tienen de 30 a 39 y los de 60 años y más.

Todo ello, de acuerdo con la base de datos del Censo de Población y Vivienda 2020 y 2021 del INEGI.

(LectorMx)