Mérida, Yucatán.- La permanencia de las abejas y la producción de miel dependen en gran parte de frenar la deforestación de la selva maya y evitar el uso de plaguicidas, pero también de que los apicultores se organicen políticamente para la defensa de los recursos naturales.

Es la conclusión de Remy Benoit Marie Vandame, investigador del Colegio de la Frontera Sur (Ecosur) y estudioso del comportamiento de la abeja Apis mellifera, en entrevista con la radio comunitaria maya de Yucatán.

Responsable desde el año 2000 de la Línea de Investigación “Abejas de Chiapas” en Ecosur, expuso el problema de la deforestación orientada al desarrollo de los munocultivos, principalmente maíz, lo que afecta la floración que requieren las poblaciones del himenóptero.

Los apicultores están perdiendo territorio, de ahí que es necesario denunciar y defenderlo, planteó.

De igual manera, prosigue la aplicación de plaguicidas en grandes extensiones de cultivos, algunos de ellos tóxicos y prohibidos como los glifosfatos, lo que ha provocado gran mortandad de abejas mieleras, denunció en Radio Xepet “La Voz de los Mayas.

El especialista sugirió a los apicultores yucatecos organizarse políticamente para la defensa y a favor de la conservación de los recursos naturales de los territorios mayas, dado que ha dado resultados favorables en años anteriores.

Recordó el frente común de productores agrícolas, incluidos los apicultores, con académicos y representantes de derechos humanos y ambientales para frenar megaproyectos como los cultivos transgénicos en la península, lo que por fin se logró con una prohibición legal.

Calificó como “un gran ejemplo” la defensa de los apicultores de Campeche, Quintana Roo y Yucatán, frente a los Organismos Genéticamente Modificados (OGM), luego de que desde el 2012 la Secretaría de Agricultura permitió ese tipo de cultivos pese al riesgo que significaba para la actividad apícola.

El gran reto de los productores de miel es detener el uso de plaguicidas, insecticidas y herbicidas que, aparte de contaminar el subsuelo, afectan la salud, el agua y a las abejas, subrayó Vandame.

El territorio maya es de gran riqueza natural, porque hay mucha floración, cultivos, pero también es una fuente de vulnerabilidad frente a los monocultivos y los plagujicidas, recalcó en la charla.

Se mostró optimista tanto por la capacidad de organización de los apicultores como por la ancestral cultura maya que prevalece en las zonas rurales y que se ha distinguido por su respeto al medio ambiente y el cuidado de los recursos naturales.

El conductor del programa radiofónico, Bernardo Caamal Itzá, tradujo en lengua maya las intervenciones del experto y exhortó a la población a organizarse para la defensa de la naturaleza y cuidado de los recursos naturales.

(LectorMx)