Por Jesús Mejía

Mérida, Yucatán.- Como un acontecimiento cultural e histórico –además de religioso para quienes profesan la fe cristiana– se presenta en Mérida la “Exposición de la Sábana Santa de Turín y el Cuerpo de Nuestro Señor Jesucristo” con imágenes sobre las huellas de sangre en el Sudario y una réplica en escultura de la talla y complexión de Jesús.

Se trata de un acervo gráfico y descriptivo sobre la tela que cubrió el cuerpo luego de la pasión y muerte en la cruz, a disposición en la galería Kristal del Centro Cultural Cumbres de la capital yucateca.

La singular muestra itinerante fue inaugurada por el vicario general de la Arquidiócesis de Yucatán, Candelario Jiménez Jiménez.

El curador y organizador, Felipe de Jesús Latapí Clausell, informó que la producción y recorrido comenzó en 2012 en la Basílica de Guadalupe.

Ahora en Mérida sólo estará tres días, del 21 al 23 de marzo, por vez primera con una escultura facsímil del cuerpo lacerado de Jesús después del Calvario.

Recostado, la figura de Cristo yace sobre una superficie plana con las heridas en las extremidades superiores e inferiores, en el rostro, así como en todo el cuerpo resultado de los azotes, la corona de espinas, la crucifixión y la lanceta clavada postrer en su costado, por lo que es la imagen más cercana recopilada de la Sábana Santa, describió Latapí respecto a la primicia.

Se trata de la reliquia más importante de la cristiandad, dijo el promotor.

La Sábana Santa mide 436 por 113 centímetros, de la cual se exhibe una copia gráfica y tridimensional especial para apreciar con mayor realismo el rostro de Jesús. También se muestran réplicas de la corona de espinas, clavos y daga utilizados en el Calvario.

Actualmente la Sábana Santa original se conserva extendida y plana en total oscuridad en una gran urna llena de gas inerte argón, equipada con sofisticados sistemas de control para prevenir traumas físicos y químicos en la capilla de Turín, Italia, cuyo custodio es el cardenal Severino Poletto, arzobispo de esa demarcación.

En esta exposición van ciencia y fe juntas, puntualizó el también presidente del Centro de Sinodología en México (dedicado al estudio de la Sábana Santa o síndone), ya que contiene información sobre los análisis científicos como el radiocarbono 14 y estudios de las texturas e imágenes hechas con la más alta tecnología.

“La Sábana Santa también es un espejo del Evangelio, ya que tiene una relación tan profunda con cuanto narran sobre la pasión y muerte de Jesús, de tal forma que todo hombre sensible se siente interiormente impresionado y conmovido al contemplarlo”, refieren los textos respecto a la manta, “en la cual se refleja el sufrimiento humano”.

“La síndone o Sábana Santa es un ícono de Cristo, nuestra esperanza que triunfó sobre la muerte. Es la impronta de un hombre que duerme el sueño del justo en la espera que la luz del amanecer traiga de nuevo la vida”.

“El síndone es una señal del paso de la muerte a la vida, de la desesperanza a la alegría. No contemplamos la Sábana Santa para deleitarnos en el sufrimiento y alejarnos con tristeza. La exhibimos y la contemplamos porque es un ícono de esa alegría Pascual que nunca podría haber existido sin el Viernes Santo”

En la apertura hubo expresiones de fe ante la réplica del cuerpo lacerado de Jesús, en tanto que el vicario de la Arquidiócesis de Yucatán resaltó la importancia de la exposición por su relación con la eucaristía. Los organizadores solicitan un donativo de 50 pesos adultos y 20 pesos adolescentes.

Este viernes 22 de marzo a las 18:00 horas Felipe de Jesús Latapí dictará su conferencia “Entró, vio y creyó” que da título a la exposición. El sábado 23, Fernando Ojeda Llanes disertará sobre “Analogías entre la sábana Santa y el manto de la virgen María de Guadalupe” en el Centro Cultural Cumbres de esta ciudad.

(LectorMx)