Merida, Yucatán.- Aunque el primer día del Año Nuevo Maya será el 26 de julio, el inicio del año 4 de acuerdo con el ciclo de la llamada Nueva Era, Yucatan resalta en el escenario cultural y costumbrista de país con la quema de un monigote que representa a El Viejo este 31 de diciembre.

Con la conmemoración del fin de año con la confección y destrucción de El Viejo en barrios y colonias populares de esta ciudad y en diversos municipios del estado,  los yucatecos dirán adiós al 2015 que está por terminar y darán la bienvenida a un nuevo período de 365 días.

El Viejo se elabora con ropa en desuso, papel o cartón, al que después se colocan “cohetes” o “bombillas” de pólvora para que explote y de esa manera dar fin a un año de pesares, problemas y preocupaciones para luego expresar la bienvenida al año que comienza.

Yucatán es lugar de residencia de uno de los exponentes más importantes del son cubano, compositor del conocidísimo tema “El Año Viejo”, Tony Camargo, cuyas letras y ritmo son interpretados a todo lo ancho y largo del país e incluso allende las fronteras.

El concepto de destrucción de lo viejo está ligado a la idea generalizada de deshacerse de lo antiguo, lo prácticamente inservible para utilizar lo nuevo y renovar así ya sea su casa, muebles o enseres como ocurre en Cuba, donde la gente acostumbra pintar sus casas al inicio del Año Nuevo.

En Merida ya se está haciendo costumbre elevar globos de cantoya con los mejores deseos de Año Nuevo para las familias, amistades y  conocidos, utilizar prendas íntimas amarillas con el fin de ganar más  dinero o rojas que permitan adquirir amor o bien barrer el polvo de la casa hacia fuera, lo que significa alejar chismes o malas influencias.

Las supersticiones forman también parte de la cultura popular, como el hecho de salir con maletas a la calle para asegurar más viajes en el año que comienza o colocar dinero en los zapatos para lograr fortuna.

Las doce uvas acompañadas por cada tañer de campana permite a la gente hilar igual número de deseo, seguido de una brindis con sidra y una opípara cena a base de pavo, pierna, lechón, romeritos, pozole o bacalao.

El año nuevo chino coincide con el primer mes del calendario occidental o gregoriano y se da pie a una celebración con mucho colorido, música, danza y gastronomía.

Un festival importante para los musulmanes es e “Eid ul Fitr” que se realiza es después del mes de ayuno de Ramadán, un encuentro para expresar alegría, esperanza y agradecimiento.

En India conmemoran el 26 de enero el inicio de su Constitución con un desfile de carros alegóricos de gran espectacularidad y dimensiones.

(Jesús Mejía)