La muestra Semillas de Vida. La sexualidad de Occidente, integrada por 210 piezas que reflejan la concepción del cuerpo entre los pueblos prehispánicos que habitaron la zona conformada por Nayarit, Colima, Jalisco y Michoacán, se inaugura este 23 de agosto en el Museo Maya de Cancún, Quintana Roo.
La historiadora Ximena Arellano Núñez, encargada del recinto, explicó que esta es la primera vez que una exposición sobre el Occidente de México se presenta en la península de Yucatán, donde permanecerá hasta diciembre venidero.
Organizada por el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), y con la curaduría del arqueólogo Daniel Ruiz Cancino, la muestra revela que para los antiguos mesoamericanos el cuerpo, en varios sentidos, constituía una referencia sobre el universo, de manera que muchas de las concepciones fundamentales sobre la existencia del hombre se vinculaban con su cosmogonía.
“El deleite sexual y el gozo de la procreación se consideraban dones otorgados a los hombres desde el ámbito divino; como consecuencia de la observación del universo, lo femenino se asociaba con la germinación, el agua, el frío, la oscuridad, la debilidad y la muerte; en tanto, lo masculino se vinculaba con la maduración, el fuego, el calor, el cielo, la fuerza y la vida”.
Ximena Arellano añadió que en las esculturas que integran la muestra —elaboradas con barro, piedra o concha marina—, está presente la desnudez, lo que al mismo tiempo exalta la diferencia sexual entre el hombre y la mujer.
En el caso de la figura alegórica de la mujer, ésta solía manifestarse de diversas maneras: embarazada, como madre y al momento de alimentar a los infantes, en parangón con la naturaleza que provee protección y alimento a las sociedades agrícolas.
En el caso de las representaciones masculinas, el sexo está expuesto e inclusive erecto en ocasiones, en alusión a que el lado masculino del universo vierte o derrama así sus energías, simbolizadas como lluvia y rayos solares.
Entre las piezas que conforman la exposición están las conocidas como Hombre con el falo como vertedera, figura de barro cocido con incisiones, correspondiente al periodo Clásico-Clásico Medio (200-600 d.C.), y Mujer de rodillas con pinturas en los pechos, hecha del mismo material, con policromía e incisiones, que data del Preclásico Tardío-Clásico Medio (220 a.C. y 600 d.C.). Ambas pertenecen al Museo Regional de Guadalajara.
Otras representaciones, provenientes del Museo Regional de Colima, son la de una mujer embarazada sentada, de barro cocido con policromía, del Preclásico Tardío-Clásico Medio (200 a.C. – 600 d.C.), y de un hombre sonriente, manufacturado con las mismas técnicas, correspondiente al periodo Clásico-Clásico Medio (200 – 600 d.C.).
Ximena Arellano refirió que la muestra llega a Quintana Roo procedente del Centro Cultural Santo Domingo, en Oaxaca; anteriormente fue exhibida en los museos del Templo Mayor, en la Ciudad de México, y en los regionales de Guadalajara y de la Laguna, en Torreón, Coahuila.
Semillas de vida. La sexualidad en Occidente permanecerá hasta diciembre próximo en el Museo Maya de Cancún, ubicado en el kilómetro 16.5 del Boulevard Kukulcán, en la Zona Hotelera de dicho destino turístico.
El costo de acceso es de 65 pesos, horario de servicio de 9:00 a 18:00 horas, de martes a domingo; este último día la entrada es libre. Están exentos de pago los menores de 13 años, adultos mayores y discapacitados, así como estudiantes y profesores con credencial vigente.
(Comunicado)