Mérida, Yucatán.- En el conflicto de la ex hacienda de Santa Gertrudis Copó, detrás del periférico norte de la capital yucateca, los habitantes originarios demandaron una “mesa de diálogo urgente” con los particulares que proyectan construcciones en espacios que son considerados públicos.

Una comitiva de representantes dirigió escritos a cinco dependencias estatales y municipales de Mérida, para entablar pláticas formales entre las partes y lograr certeza jurídica para los pobladores.

Leydi Cocom Valencia, con aval de 224 firmas de afectados, pidió respeto para las áreas colectivas en dicho asentamiento y exigió respuesta de las autoridades de los tres órdenes.

“Queremos que se dirima de la mejor manera esta situación, por respeto a nuestro pueblo”, puntualizó a las puertas de la sede del Ejecutivo de Yucatán.

Este es el segundo documento que entregan en la Oficialía de Partes del Gobierno del Estado; el primero se registró el 20 de marzo, pero hasta ahora no hay contestación.

“¿Qué podríamos hacer? ¿Cerrar periférico? ¿Es necesario llegar a eso?, osea, ¿En la hora pico de City Center? No deberíamos, es la segunda solicitud. ¡Por favor autoridades, por favor!”, reflexionó en entrevista.

Adelantó que esperarán dos semanas para que las instancias notificadas actúen frente al problema.

Debido a que el casco de la ex hacienda está catalogado como patrimonio cultural de Mérida y por la supuesta existencia de cenotes en el sitio, se solicitó la intervención del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) que, a su vez, comprometió una respuesta el próximo miércoles.

La construcción de cimientos de una barda detonó la movilización y la inconformidad de los vecinos, quienes a mediados de marzo lograron la clausura temporal.

“Nos quedaron muchas dudas”, acotó Leydi, quien también lideró una protesta la semana pasada para denunciar presiones y tensiones por la presencia de trabajadores en el predio.

Además, los propietarios del inmueble desalojaron “a unas personas que vivieron durante más de 70 años” en el lugar.

Martha Capetillo Pasos, del Equipo Indignación A.C. y acompañante en la lucha, manifestó que el pueblo debe de estar enterado de lo que ocurre y de qué se va a construir.

“Es muy importante que los trabajos continúen detenidos, pero también que se dé una respuesta a la solicitud que se está planteando”, estimó.

(LectorMx)