Mérida, Yucatán.- La tercera estación del año arribará puntualmente hoy a las 14:20 (2.20 de la tarde) al hemisferio norte del planeta y, por ende, también a Yucatán, y durará exactamente 89.84 días.

Esto quiere decir que la cuarta estación, el invierno, llegará el 20 de diciembre aproximadamente a las 9:00 horas (9 de la mañana, tiempo de Yucatán), y durará 88.97 días.

Y ahora, como se ha notado en el último mes, la oscuridad comienza a ser más prolongada que luz del día, pero no será sino hasta el 28 de septiembre que ocurra el equinoccio de otoño 2021, es decir, la igualdad entre día y noche.

En Yucatán, ese día, el sol saldrá a las 6:49 horas (6:49 de la mañana) y se ocultará a las 18:49 horas (6:49 de la tarde), lo que muestra la partición exacta, por la mitad, de la jornada: 12 horas de luz y 12 horas de oscuridad.

En cambio, hoy 22 de septiembre, el Astro Rey se asomó en el horizonte mexicano a las 6:47 horas (6:47  de la mañana) y esta tarde se ocultará a las 18:54, es decir, habrá 7 minutos más de luz, por lo que el “igual día, igual noche” (significado de equinoccio) no ocurrirá.

Sin embargo, acostumbramos llamarle así al cambio de estación e incluso a los fenómenos de luz y sombra que ocurren en ciudades mayas, y que anuncian precisamente ese cambio.

De los más conocidos, en Dzibilchaltún, Kin recorre, en su “despertar” un camino que lo hace pasar por la ventana principal del Templo de las Siete Muñecas. En Chichén Itzá, 7 triángulos de luz y sombra forman el cuerpo de Kukulcán, la Serpiente Emplumada, que hacen parecer que baja.

Para pesar de muchos, ambos sitios permanecen cerrados hoy al público, lo que impedirá que los turistas puedan acudir a cargarse de energía o, simplemente, admirar uno de los aspectos más asombrosos de la civilización maya: la precisión.

No obstante este cierre inesperado por parte del Instituto Nacional de Antropología e Historia -pues, en Yucatán, la tendencia es abrir cada vez más las actividades para volver a la normalidad-, en el caso de Chichén Itzá, la ventaja es que puede verse incluso hasta los primeros días de octubre, así que nada se pierde, salvo disfrutarlo el mero día del cambio de estación.

El otoño supone un poco menos de calor para nuestra ardiente península de Yucatán, y parece que precisamente este “brinco” a la cuarta estación lo “anunciará” el primer norte de la temporada invernal. Si bien no se prevén cambios bruscos en la temperatura, las lluvias asociadas al sistema frontal refrescará un poco el acalorado mes de septiembre.

Se pronostica que las precipitaciones, que pueden iniciar hoy, se prolonguen hasta el fin de semana, lo que, en todo caso, significarán un respiro en medio del ambiente casi veraniego que prevalece en el mes patrio.