Mérida, Yucatán.- Activistas de organizaciones de apoyo a pacientes con VIH-SIDA expusieron que persiste desde hace varios meses desabasto de medicamentos en clínicas y hospitales del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE) Yucatán.
“La situación es cada vez es más complicada para las personas infectadas con VIH (Virus de Inmunodeficiencia Humana), ya que no ha sido posible completar su tratamiento en tiempo y forma”, plantearon Pablo Alemán Góngora, presidente de la Red de Personas Afectadas por VIH (REPAVIH) y Luis Adrián Quiroz, de la Organización Salud, Derechos y Justicia.
Según sus cálculos, unos 400 pacientes de Yucatán, a los que se suman alrededor de 150 de Campeche con ese padecimiento, enfrentan este problema, aunado a negativas de citas médicas de parte de especialistas.
“Es importante recordar que el éxito del tratamiento para VIH depende del suministro oportuno del antirretroviral, por lo que se considera sustento de vida”, puntualizó Alemán Góngora.
Informó que ambas organizaciones sostuvieron reuniones en agosto y septiembre con autoridades del ISSSTE a nivel central, pero hasta ahora han resultado infructuosas.
“Y pareciera que no les importa nada el poder garantizar el tratamiento antirretroviral para los enfermos”, denunció.
En rueda de prensa reveló que también en la Ciudad de México y otras entidades federativas prevalece desabasto, en particular la clave 4396011 de Tenofovir/Emtricitabina, que es piedra angular para muchas personas que viven con VIH.
A su vez, Adrián Quiroz comentó que el ISSSTE nacional autorizó a los directores de las unidades estatales realizar las compras a nivel local; sin embargo, los responsables en Yucatán no lo han hecho.
Además, compartió que se han interrumpido los estudios de seguimiento para medir la eficacia del tratamiento a cargo de los laboratorios de carga viral y conteo de CD4, pues el ISSSTE ya no está pagando el servicio.
“Hay compañeros de Yucatán y Campeche que no han tomado medicamentos desde hace dos meses y esta situación se agrava”, dijo el representante de Repavhi acompañado por otros activistas.
“Los pacientes tienen miedo a expresarse, a ser exhibidos, miedo a que haya algún tipo de represalia de las autoridades del ISSSTE y por eso prefieren callar”, abundó.
De acuerdo con datos del Centro Nacional para la Prevención y Control del VIH/SIDA (Censida), Yucatán ocupa el tercer lugar en mortalidad de las personas derechohabientes.
Por lo anterior, los declarantes hicieron un llamado a Pedro Zenteno Santaella, titular del ISSSTE, para que impulse transformaciones institucionales en la delegación Yucatán que resuelvan las carencias.
Solicitaron garantizar el suministro de medicamentos antirretrovirales y asumir un compromiso de trabajo conjunto con las organizaciones de la sociedad civil y los derechohabientes afectados.
(LectorMx)
