Mérida, Yucatán.- El verano terminó en esta parte del hemisferio y la zona arqueológica de Dzibilchaltún registró el cambio con su equinoccio de otoño, etapa del año en que el día y la noche tienen la misma duración.

Aunque el sitio prehispánico amaneció con neblina que alimentó temores de los visitantes de un viaje en vano, al final el Sol benevolente se posó sobre la ventana oriente del Templo de las Siete Muñecas.

El deslumbrante esplendor ocurrió minutos antes de las 7:00 horas, casi en el límite de la paciencia, ya que los interesados comenzaron a llegar de desde las 5:00 de la madrugada.

El acceso limitado a 250 personas, según disposiciones del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH).

Residentes de Mérida y los alrededores, turistas nacionales y extranjeros, observaron el fenómeno arqueoastronómico.

Dzibilchaltún, ubicada al norte de Mérida, abrirá puertas tres días para que el público pueda apreciar esta conjunción de la naturaleza con la estructura maya.

En forma especial, el INAH fijó entradas los días 21, 22 y 23 de septiembre a las 5:30 horas.

Además del uso de cubrebocas obligatorio, y se requiere pago de 85.00 pesos.

(LectorMx)