Por Bernardo Caamal Itzá

Peto, Yucatán.- La mañana de hoy, el campo Morelos, fue el escenario de un acto criminal al envenenar a perros, entre los cuales, se encontró “Vicky”, y con su muerte dejó a la orfandad a sus 5 cachorros con escasos meses de edad.

Quienes vivimos en Peto, sabemos que en los últimos meses, en muchas de sus colonias, los ladrones, entre sus estrategias, antes de robar las casas-habitación, se ensañan primero con los fieles guardianes y amigos del hombre.

“Vicky” siempre protegió su casa y de aquel campo que hoy atestiguó su muerte, para algunos solo serán unos simples perros, pero para aquel campo, eran quienes entre que cuidaban sus casas por ratos salían a correr por las noches.

La historia de “Vicky” resalta que hace unos meses, sus amigos quienes habitaban esa casa que tanto amó, tuvieron que ausentarse, debido a la enfermedad crónica de sus familiares, por lo que tuvieron que llevar a todos sus animales.

“Vicky” fue la única que se negó a ir a la otra casa, aunque lo llevaron en varias ocasiones, pero siempre regresó en aquel domicilio donde creció; lo que ocasionó que sus dueños, le llevaran sus alimentos, mientras que ella permaneció y protegió aquella casa.

El can fue un fiel guardián, estuvo casi las 24 horas en aquella solitaria casa; con el paso del tiempo “Vicky” el verano pasado, el destino le premió el verano con 5 cachorros.

Su parto fue bajo la vigilancia de los señores del monte, cuidó con esmero a sus hijos y no se caracterizó en andar por otros predios, solo de vez en cuando iba al domicilio de sus amigos, pero esas horas de breve ausencia, estoy seguro que supo comunicarles a sus hijos como deberían protegerse de esos malos momentos, porque en ocasiones hemos visto de cerca, merodear algunos de los reptiles.

Solo cuando “Vicky” se tardaba algo de tiempo, es cuando los cachorros salen de su casa para ir en aquel cerro para esperar a su madre, mirando siempre por aquella dirección al que vendría.

A su regreso, atestiguamos esos momentos de alegría de sus pequeños, ya que, entre los ladridos cariñosos y juegos, se daba ese lujo de acariciarse y luego entrar en aquella casa que luce semi abandonada y con su presencia, le dan vida.

Sin embargo, la noche del sábado 11 de febrero, “Vicky” salió para nunca regresar, porque malhechores que arribaron al campo “Morelos” en las altas horas de noche fueron quienes repartieron veneno a los canes, incluso hubo huellas en que amarraron y se ensañaron con los animales.

“Vicky” no debió morir, aun le faltaba algunos meses por cumplir con esa sagrada misión que tiene como madre, y hoy, antes de que llegue la noche, sus pequeños saldrán de nuevo a esperarla, pero la frialdad nocturna los hará desistir, y les será una noche muy larga y la primera que estarán sin el cobijo maternal, ahora les toca enfrentar “al mundo y sus antivalores, pero en sus memorias, quedará esa imagen viva de esa fiel madre (de color entremezclado negro y verde olivo), que protegió su casa y que ahora les corresponderá esa tarea de hacerlos.

Estoy seguro que los 5 pequeños extrañaran esas cálidas atenciones de su madre y de esos ladridos en que avisa a los fuereños “No te acerques en esta casa, porque aquí estamos para defenderla”

Hoy, 5 valerosos cachorros se quedaron a la orfandad, con solo verlos, te parten el corazón, porque entre sus juegos en la mañana y mediodía de hoy, por ratos, los veía correr por aquel cerro en espera de su madre y que hace unas horas los malhechores se ensañaron con ella.

Claro que el campo “Morelos” hasta hoy, es nido de borrachines y que muchos de ellos terminan festejando cada encuentro deportivo; de parejas y de jóvenes que acuden a fumar la mota en altas horas de la noche.

Hasta siempre valerosa “Vicky” y espero que en el lugar eterno de los perros, te encuentres con “el oso juguetón” que siempre supo ganarnos el corazón.

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