Mérida, Yucatán.- El proyecto de modernización del parador turístico de Chichén Itzá, que supone una solución integral y de fondo para esa zona arqueológica, no tiene el apoyo de la principal agrupación de artesanos y comerciantes de ese lugar.

Dirigentes del colectivo desmintieron a los titulares de la Secretaría de Fomento Turístico (Sefotur), Saúl Ancona Salazar, y del Patronato de las Unidades de Servicios Culturales y Turísticos del Estado (Cultur), Dafne López Martínez, así como al delegado en Yucatán del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), Eduardo López Calzada.

En un posicionamiento de respuesta, reprocharon que no se les haya tomado en cuenta y menos consultado, que están dispuestos a defender sus fuentes de ocupación y eventualmente entablar pláticas con las próximas autoridades de los tres órdenes de Gobierno.

Al dar lectura a un escrito, solicitaron a López Martínez copia certificada de dicho proyecto, para conocer el costo, así como la empresa o institución lo realizó, dada la sospecha de que se pudiera estar intentando “cuadrar cuentas” a días de dejar cargos en la administración estatal.

Como referencia se tomaron declaraciones oficiales de que podría costar entre 70 y 100 millones de pesos, y que será el siguiente gobierno el que lleve a cabo los trabajos, las gestiones para el desalojo de los más de mil ambulantes y la asignación de nuevos espacios.

“Sobre esa cantidad de dinero que esta autoridad declara debemos pensar que el costo del proyecto sería solo la mitad, ya que sabemos cómo este gobierno gasta y se roba el dinero del pueblo”, puntualizaron.

Del director de Cultur cuestionaron que sus promesas, a los 800 socios de la asociación, se las haya llevado el viento.

A los líderes de la iniciativa privada que respaldaron el plan el pasado 10 de agosto, entre ellos el presidente del Consejo Coordinador Empresarial, Michel Salum Francis, los acusaron de ver a Chichén Itzá como “un Disneylandia”, botín o emporio empresarial, “la gallina de los huevos de oro”, y no como el Patrimonio Cultural material e inmaterial o quinta maravilla del Mundo Moderno.

En propuesta, pidieron la reanudación de las mesas de diálogo, que el INAH expropie la propiedad privada de unas 700 hectáreas, sin afectar a los ejidos de los alrededores, y que el 15 por ciento de los ingresos que captan mensualmente Cultur e INAH se destine al municipio de Tinum.

Juan Pablo Euán Cen, uno de los afiliados, aseguró que no están en contra de la reestructuración y ampliación del parador turístico, debido a la creciente afluencia de visitantes y que el estacionamiento es insuficiente.

“Pero definitivamente lo que a nosotros nos enoja es que dicen que ya tomamos acuerdos cuando realmente desconocemos totalmente este proyecto”, explicó.

Igual, subrayó que no existen ambulantes dentro del sitio prehispánico y que como agrupación constituyen un problema para los intereses económicos de los empresarios que operan allí.

“Porque entonces estamos obstaculizando el poder robar con libertad al turista; estamos afectando la manera tan vil de cómo están estafando a los turistas”, enfatizó.

Villevaldo Pech Moo, asesor jurídico, señaló que si partimos de las leyes “los comerciantes-artesanos no deben de ser reubicados”, y apeló al convenio 169 de la Organización Internacional del Trabajo y el Artículo 2 Constitucional de México, entre múltiple legislación.

Y alertó que el desalojo de los comerciantes-artesanos de Chichén Itzá podría ocasionar “un desorden, un caos y hechos de sangre” en el oriente de Yucatán.

Juan Luis González Espadas, miembro honorario, respaldó esa advertencia y aclaró que la solución no llegará desde posiciones de fuerza.

“Una cosa debe quedar muy clara cuando estos señores hablan de desalojo: que ni lo sueñen; la organización de artesanos y comerciantes tiene experiencia, se ha enfrentado en ocasiones a la propia Policía cuando han desalojado”, amagó.

Aseveró que cualquier decisión ahora sólo puede ser producto de una mesa de diálogo y en el contexto de la situación nacional “que se presta”.

“Estamos listos para salir al paso de cualquier amenaza”, sentenció.

Mariana Mex Yam, lideresa del grupo, informó que hace apenas tres días se acercó personal de Cultur para hablar de un proyecto que no existe, que sólo será de sensibilización.

“Ahora si ellos no respetan, con pena y sentimiento, nosotros nos vamos a levantar y vamos a pelear caiga quien caiga”, adelantó.

“Pues si ellos nos provocan, porque la verdad ya estamos hasta la madre que nos sigan tratando con lo mismo; ya estamos fastidiados y acá es el momento de tomar acciones, de verdad, siempre nos pisan, siempre nos humillan”.

Refirió que la mayoría de sus compañeros tiene de 17 a 18 años vendiendo en la zona arqueológica, sin apoyo mínimo del Gobierno del Estado.

(LectorMx)