Mérida, Yucatán.- De manera definitiva, tajante, sin concesión alguna sobre la posible revisión de todo el proceso de autorización oficial, representantes de la “Asamblea de Defensa del Territorio Maya Múuch´Xiinbal” demandaron la suspensión del proyecto del parque fotovoltaico en el municipio de Valladolid.

Candelaria May, Gregorio Hau y Flavio Ayuso, integrantes de la asociación aseveraron que mediante engaños a los propietarios y asambleas amañadas, las empresas Lightering PV Park y Jinko Solar obtuvieron los permisos y el aval oficial para instalarse en 255 hectáreas.

Por esas irregularidades, mencionaron haber promovido un amparo ante un tribunal de la Federación y el pasado 16 de abril el juez Pablo Solís Briceño otorgó la suspensión provisional de actividades en el planeado complejo ubicado en un polígono cercano a Ebtún y Dzinup, al poniente de Valladolid.

Los representantes expusieron en rueda de prensa que las empresas ya iniciaron el proceso de deforestación de las 255 hectáreas de afectación donde prevén instalar más de un millar de celdas fotovoltaicas por las cuales buscan generar 97 megawatts de energía eléctrica.

El abogado de la organización, Rusell Peba, señaló que aún no hay fecha para la sentencia definitiva en torno del amparo y advirtió que tanto las autoridades como las compañías recurrirán a “chicanadas” para revertir la reciente resolución.

Los presentes rechazaron una revisión de todo el proceso y consulta a la comunidad, y reclamaron la suspensión definitiva del proyecto anunciado en 2016.

Cuando fueron cuestionados sobre los recientes apagones y la necesidad de generar mayor cantidad de energía en Yucatán, indicaron que corresponde a la comunidad pronunciarse sobre la instalación; sin embargo, expresaron su rechazo a la operación de la mega planta fotovoltaica.

Gregorio Hay, quien dijo ser residente una de las localidades aledañas, manifestó que la deforestación afecta recursos de flora y fauna, así como los apiarios que predominan en zonas de selva alta (aunque los expertos señalan que la mayor parte de la superficie del estado de Yucatán está cubierta por selvas bajas caducifolias).

En cuanto a la urgencia de contar con plantas de generación de energías limpias, reviraron no estar en contra del progreso, aunque no fijaron una contrapropuesta y reiteraron su oposición al proyecto.

De acuerdo con datos de la propia organización en el territorio yucateco se tienen proyectados en principio 15 proyectos de generación de energía eléctrica de los cuales nueve son eólicos que impactarían en siete mil 788 hectáreas y seis solares que afectarían mil 160 hectáreas, para un total de ocho mil 949 hectáreas.

Los proyectos eólicos serían en Sinanché, Yobaín, Telchac Puerto, Tizimín, Cansahcab, Motul, Suma, Temax, Tepakán, Teya, Yobaín, Progreso, Dzilam de Bravo e Izamal, en tanto que los de energía solar en Muna, Sacalum, Ticul, Peto, Sucilá, Valladolid y Progreso.

A lo anterior se suman a otros tres proyectos en Uayma, Buctzotz y Chicxulub que en conjunto afectarían más de seis mil hectáreas.

(Jesús Mejía)