LinkedIn es una de las herramientas más usadas en el mundo para buscar trabajo.

La popular plataforma de internet ofrece a sus más de 500 millones de usuarios establecer una red de contactos y servir de escaparate en el que dar visibilidad a su currículum y experiencia laboral.

También permite compartir contenidos, seguir a empresas y reclutadores y recibir ofertas personalizadas.

Pero tiene algunos riesgos: es el escenario perfecto para llevar a cabo estafas, pues es habitual agregar a contactos completamente desconocidos.

Algunos estafadores utilizan la red social para hacerse pasar por reclutadores y obtener los datos de los usuarios.

Y esos datos -como tu correo electrónico, tu número de teléfono o direcciones profesionales- pueden usarse después para ser vendidos a terceras personas… o para cometer fraudes de suplantación de identidad (phishing).

“Así como los solicitantes de empleo utilizan LinkedIn para conectarse con excolegas y empleadores potenciales, los estafadores también usan el servicio para encontrar posibles víctimas”, explican desde la organización Better Business Bureau (BBB), conocida por calificar empresas con base en su calidad de servicio al cliente.

“Es importante siempre tener cuidado cuando buscas trabajo porque las estafas de empleo pueden suceder en donde sea: a través de correo electrónico o texto, en los medios sociales y en los sitios de trabajo”.

Es, según el informe Índice de Riesgo de BBB, la tercera estafa más habitual.

A veces, intentan llamar la atención de quienes buscan empleo publicando ofertas de trabajo en la plataforma. Otras, usan vínculos a sitios web fraudulentos en donde piden su información.

Se trata de un engaño persuasivo que llevan a cabo usando cuentas falsas que les permitan reflejar una imagen creíble.

(Información completa: bbc.com/mundo)