Por Bernardo Caamal Itzá
Peto, Yucatán.- Pese a la ley seca que impera en los municipios del sur de Yucatán, debido a la contingencia del Covid-19, no todos obedecen.
Por un lado, aún no hay consciencia entre muchos lugareños, aún siguen reuniéndose con su banda para seguir ingiriendo bebidas alcohólicas en los lugares públicos.
“Es fácil conseguir las cahuamas, sólo que ahora una vale 70 pesos”, comentan consumidores que se reúnen en ciertas calles de la colonia de Las Tres Cruces de Peto.
“Pero no nos pasará nada, con el alcohol nos desinfectamos la panza y tal vez un poco en manos, baax virus, no pasará nada”, bromean.
Lo mismo sucede en Tahdziú, lugareños reportan que en estos días, los clandestinos “se hinchan de billetes” y la gente sigue con las bebidas pese a la contingencia.
Con el negocio de los clandestinos, las autoridades hacen de la vista gorda, porque muchos están coludidos con estos negocios y no aplican mano dura, comparten otros habitantes mediante escritos.
“Urge que todos colaboren, las autoridades municipales realmente se apliquen en estos tiempos de contingencia, en lugar de estar entregando gel para mostrar que está trabajando”, señalan.
Advierten los pobladores que el personal contratado para esas labores no está funcionando o lo hacen sólo para la foto.
(LectorMx)
