Mérida, Yucatán.- Vecinos de Sisal, comisaría del municipio de Hunucmá, solicitaron intervención del gobernador Joaquín Díaz Mena para evitar mayor daño a la duna costera, así como posibles represalias por parte del grupo liderado por Jorge Burgos Novelo (a) “Mulato”, Daniel Esquivel y Alan Hernández, a propietarios de predios aledaños al área intervenida.

“Algunos llevamos hasta 40 años viviendo en Sisal, y lamentablemente, ahora somos víctimas de las amenazas por el simple hecho de tener nuestros predios en un terreno que de manera ilegal es deforestado, a tal grado que ayer, miércoles 7, toda la vegetación que quitaron la tiraron en nuestras casas, como advertencia por tomarles fotos y videos para luego subirlas a las redes sociales”, afirmó Flor Carvajal.

Cerca de 50 personas acudieron a Palacio de Gobierno para entregar un oficio con la petición dirigida al mandatario.

Según dijeron, buscan recuperar la tranquilidad en el puerto, evitar un mayor deterioro a la vegetación protegida y gestiones de pronta intervención de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), así como de la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa).

La mayoría de los inconformes optó por omitir su nombre, ya que –comentaron– los tres antes señalados controlan a más de 50 personas, y todas portan machetes.

“Esperemos que hoy, por la tarde, no tengamos problemas por pedir la intervención de gobernador”, coincidieron.

El sábado, publicamos que en desafío a las autoridades estatales y federales, pobladores de Sisal reanudaron la deforestación de la duna costera de la calle 21 poniente, entre el Centro de Salud y el muelle del puerto.

Con “la limpieza” del terreno, de 10 hectáreas, los lugareños pretenden obtener títulos de propiedad otorgados por el Ayuntamiento de Hunucmá, y cada terreno tendría un valor superior a un millón de pesos.

Los ocupantes irregulares de ese espacio frente al mar habrían recibido promesa de lotes de ocho por 20 metros.

(Didier Madera)