Ciudad de México.- En la ruta de la continuidad de los últimos seis años, la doctora Claudia Sheinbaum Pardo asumió este martes como la primera presidenta de México.
Al rendir compromiso constitucional para el período 2024-2030, marcó el arranque del segundo piso de la denominada cuarta transformación.
En su discurso, abordó los principales temas que dominan en el presente y futuro del país.
Incluyó mensajes que intentan tranquilizar en lo interno o revertir temores externos de retrocesos democráticos y económicos.
“En nuestro gobierno, garantizaremos todas las libertades, la de expresión, de prensa, de reunión, de movilización. La libertad es un principio democrático y nosotros somos demócratas. Se respetarán los derechos humanos y nunca usaremos la fuerza del Estado para reprimir al pueblo”, expresó.
“Respetaremos y garantizaremos la diversidad religiosa, política, social, cultural y sexual de nuestra sociedad. Cualquiera que diga que habrá autoritarismo, está mintiendo. Nuestra política exterior seguirá los principios constitucionales de autodeterminación de los pueblos, la no intervención y la solución pacífica de controversias”, dijo desde la máxima tribuna del Congreso de la Unión.
“En materia económica, se mantendrá la autonomía del Banco de México, una política fiscal responsable, una proporción razonable entre deuda y Producto Interno Bruto, promoveremos la inversión pública y la inversión privada. Lo digo con toda claridad. Tengan la certeza que las inversiones de accionistas nacionales y extranjeros estarán seguras en nuestro país”, remachó.
Como su antecesor Andrés Manuel López Obrador, garantizó que no aumentará el precio de las gasolinas, diésel, gas doméstico ni electricidad en términos reales.
También anunció que en las próximas semanas se convocará a empresarios para confirmar el acuerdo que mantiene sin aumentos los precios de la canasta básica.
“Aprovecharemos la relación del tratado comercial con Estados Unidos y Canadá para seguir impulsando la relocalización de las empresas, mientras se promueve el desarrollo regional con bienestar y cuidado al medio ambiente. Estados Unidos, Canadá y México sabemos, que la cooperación económica fortalece a las tres naciones.
“Es claro que entre nosotros no competimos, nos complementamos y, además, generamos las condiciones para una mayor consolidación de la economía de todo el continente en una visión de presente y futuro de la economía mundial”, definió.
Sheinbaum Pardo adelantó que, de la mano del sector empresarial y de las y los trabajadores, seguirá el aumento al salario mínimo hasta alcanzar 2.5 canastas básicas.
“Haremos el programa de digitalización más ambicioso de la historia para facilitar el pago de impuestos y otros trámites; así como para incentivar la inversión”, reveló.
Contrario a la percepción de amplios sectores, la morenistas comprometió que habrá Estado de Derecho.
“La reciente reforma constitucional al Poder Judicial, que marca la elección por voto popular de jueces, magistrados y ministros, significa más autonomía e independencia para el Poder Judicial.
“Piénsenlo, sólo por un momento, si el objetivo hubiera sido que la presidenta controlara la Suprema Corte, hubiéramos hecho una reforma al estilo Zedillo. No. Eso es autoritarismo, nosotros somos demócratas. Queremos que se termine la corrupción en el Poder Judicial. Es un proceso en donde habrá una convocatoria única, un comité de selección de candidatas y candidatos para garantizar que cumplan los requisitos y quien decidirá será la gente, será el pueblo. ¿Cómo va a ser autoritaria una decisión que en esencia es democrática y permite que el pueblo decida?”, justificó.
En esa parte de su mensaje, apostó por que “en unos años, todas y todos estaremos convencidos que esta reforma es lo mejor.
“Aprovecho para decirle a las y los trabajadores del Poder Judicial que sus derechos y salarios están totalmente salvaguardados”, insistió.
En el cierre, refrendó que gobernará para todos y para todas.
“Y tengan la certeza de que pondré mi conocimiento, mi fuerza, mi historia y mi vida misma al servicio del pueblo y de la patria. Tengo la certeza de que consolidaremos juntas y juntos un México cada día más próspero, libre, democrático, soberano y justo. No les voy a defraudar”, sostuvo.
Según sus datos, después de 200 años de la República y de 300 años de la Colonia, porque previo a ello no tienen registros claros; es decir, después de al menos 503 años, por primera vez, llegan las mujeres a conducir los destinos de la Nación.
“Y digo llegamos, porque no llego sola, llegamos todas…”, puntualizó.
(LectorMx)