Mérida,Yucatán.- Un experto reportó pérdidas de considerables extensiones de manglares de la Península de Yucatán por la contaminación ambiental, el daño causado por los pescadores, la deforestación y la ampliación de la mancha urbana, lo que constituye, afirmó, un atentado al equilibrio natural de la zona y del planeta.
Jorge Herrera Silveira, adscrito al Centro de Investigaciones y de Estudios Avanzados (Cinvestav) Unidad Mérida, indicó que en los últimos 30 años se han perdido 32 mil hectáreas de mangle, lo mismo en Progreso, que en Cancún, Puerto Morelos, Riviera Maya y Mahahual, principalmente.
Expuso que es fundamental resguardar y proteger los manglares de la región, ya que representan el 50 por ciento de ese tipo de ecosistema en el país y juega un papel importante en el equilibrio del clima del planeta.
Explicó que los manglares constituyen efectivos captadores y depositarios de los gases de carbono causantes del efecto invernadero y, por ende, del calentamiento global o cambio climático, de acuerdo con análisis del suelo y del subsuelo realizados en zonas donde se encuentran diversas especies de mangle.
“Yucatán es muy rico en manglares, incluso las de Petenes, que son los principales depositarios de carbono, lo que ayuda a mitigar los efectos de los gases de efecto invernadero en la atmósfera”, recalcó durante su participación en el Sexto Congreso Nacional de Investigación en Cambio Climático que se realiza en esta ciudad.
En entrevista, mencionó que ese ecosistema en Yucatán ha sido dañado por la depredación humana, además de la falta de conciencia y educación ya que usa esos espacios como basureros, además de que los pescadores utilizan tallos de diversos tipos de mangle para la captura de pulpo.
Ante científicos en biología marina, ecología, reservas naturales y otras disciplinas provenientes de diversas instituciones de educación superior como la Uady, UNAM y de la Red Interinstitucional de Cambio Climática del Sureste de México, entre otras, Herrera Silveira urgió tomar medidas para proteger los manglares y coadyuvar así al almacenamiento de carbono.
Destacó que después de India, Australia y Brasil, México es el principal país con extensiones de mangle y en ese sentido la Península de Yucatán es una región que aporta más de la mitad de esa riqueza, de ahí la necesidad de protegerla.
Explicó que en el suelo sedimentado se encuentra atrapado el carbono y la mayor está en la zona de los Petenes, con especies arbóreas que alcanzan hasta los 20 metros de altura, en tanto que en otras zonas persisten especies de baja altura y pastizales llamados “chaparros”.
Resaltó que el Cinvestav trabaja con un grupo de 21 voluntarias conocidas como “Las Mujeres de Chelem”, con las cuales se han podido recuperar o restaurar el mangle desde hace siete años, tarea que es importante extender a todas las comunidades del litoral yucateco.
(Jesús Mejía)