Mérida, Yucatán.- Además de encerrar en su propio hogar a la mitad de los seres humanos, la pandemia del coronavirus Covid-19 les ha quitado incluso la atención sobre asuntos “importantes” y hasta les ha borrado la memoria.
La rápida expansión del virus por el mundo no ha hecho más que centrar todo en derrotar a la enfermedad que ya infectó a más de 120 mil personas y ha cobrado la vida de más de 60 mil, en apenas tres meses.
La cuarentena casi obliga a “olvidarse” de fechas importantes, así sean cumpleaños, aniversarios, efemérides y ha vuelto “iguales” los días de la semana: da lo mismo si es lunes o domingo. De todos modos no se puede salir.
¿Y las vacaciones? Ni se diga. Empezaron el viernes 3 de abril, pero como las escuelas cerraron hace dos semanas nadie le tomó importancia. Además, tampoco hay viajes de descanso a ninguna parte del mundo.
Las efemérides “se pasan de noche”. De hecho, apenas dio tiempo para que las mujeres tomaran las calles el 8 de marzo para protestar en su Día Internacional.
Después de eso, nada… el 2 de abril fue Día Internacional de Concienciacion sobre el Autismo… y ya. Casi nadie se acordó.
El mismo destino se augura para días como de la Salud (7), de la Tierra (22), del Libro (23) y hasta del Niño (30), aunque este es sólo en México.
Hoy es Domingo de Ramos, el inicio de la llamada Semana Mayor y las iglesias están cerradas. No hay misas y el rito de la entrada de Jesús a Jerusalén será imaginaria.
Por si fuera poco, a las 2 de la mañana de hoy entró en vigor el polémico Horario de Verano, una medida que probablemente tenga las horas contadas si el actual Gobierno federal lo somete a consulta cuando pase “el temblor”.
Por cierto ¿adelantó una hora su reloj? Bueno, quizás eso tampoco sea importante a menos que el cambio de horario le hará pasar tan sólo 23 horas (y no 24) confinado en su propia casa.
