Mérida, Yucatán.- Con el objetivo siempre claro de edificar con una visión de largo plazo, Ingeniería y Desarrollo Inmobiliario de México S.A. de C.V. (IDIMSA) se erige como la firma que construyó las principales obras que cambiaron el rumbo económico de todo el sureste de México.
La empresa fundada el 23 de febrero de 1998, por el visionario ingeniero Ariel Medina Medina, cuenta con un amplio catálogo de más de 200 obras de infraestructura desarrolladas en 25 años, generando empleos, con una derrama económica de varios miles de millones de pesos.
Sin embargo, si hay una obra que le cambió la cara al turismo de convenciones en el estado y que ha generado la obtención de eventos de tallas internacionales, esa es el Centro de Convenciones Siglo XXI, la primera gran obra de IDIMSA. Este fue el inicio del repunte económico del sector y el primer paso para el acelerado crecimiento durante los últimos 20 años.
Inaugurado el 28 de enero de 1999 con la presencia del entonces Presidente de la República, Ernesto Zedillo Ponce de León, el Centro de Convenciones Siglo XXI fue un parteaguas para la entidad, ya que se convirtió en la primera gran sede para exposiciones masivas. Hasta el momento el estado sólo contaba con las instalaciones de la Cámara Nacional de Comercio, Servicios y Turismo, y las de algunos hoteles de la ciudad, las cuales quedaban insuficientes para las aspiraciones económicas de Yucatán.
Diseñado por el reconocido arquitecto Pedro Ramírez Vázquez, IDIMSA con su experiencia y un talentoso equipo de trabajo participó en la edificación del gran proyecto que contó con una superficie total de 84 mil metros cuadrados y una superficie techada de 20 mil 900 m2; además se construyó con un estacionamiento para dar cabida a mil 543 autos y seis autobuses. Dicha obra se realizó bajo la figura de Asociación en Participación Solidaria y Mancomunada, conformada además de IDIMSA, por las empresas Ingeniería y Sistemas Constructivos Mexicanos de Agustín Rivas Sosa; Constructora Urbanizadora Bastarrachea y Carrillo de Jorge Alberto Bastarrachea Sosa y Corporativo de Ingeniería Civil e Instalaciones de Víctor Manuel May Vera; así como por los ingenieros Jorge Ricardo Matos Sánchez y Jorge Eduardo Duarte Cusi.
Tenía 3 salones principales, siendo el más grande el Chichén Itzá, que contaba con un espacio para 12 mil personas en auditorio y 6,500 personas en banquete.
El segundo más grande fue el Salón Uxmal con un espacio para 6,000 personas en auditorio y 3,000 en banquete, mientras que el tercero es el Ek-Balam, que es más pequeño con una capacidad de 350 personas en auditorio. Además, en el 2014 la empresa peninsular realizó la remodelación del salón Uxmal.
El aporte del Centro de Convenciones fue inmediato, ya que al siguiente año de ser inaugurado fue sede de la edición número 26 de la Conferencia Regional de la FAO para América Latina y el Caribe y a partir de allí, el turismo de convenciones estuvo en franco crecimiento.
Para el 2008, apenas 9 años después de haberse inaugurado, Yucatán tuvo un total de 156 eventos de congresos y convenciones, de los cuales la gran mayoría fueron en el flamante Siglo XXI. Pero 19 años después, en el 2018, la cifra fue de 254.
Estos datos también se vieron reflejados en el número de visitantes en este segmento de turismo, ya que en el 2008 hubo 53,869 personas que llegaron a Yucatán por concepto de congresos, y en el 2019 esta cifra ya fue de 122 mil 733.
Pero el impacto económico no sólo se queda allá, ya que con esta obra IDIMSA contribuyó al desarrollo de esa zona de la ciudad, que hoy en día es una de las más importantes a nivel comercial.
La aportación de la empresa de Ariel Medina al turismo no sólamente incluye al Siglo XXI, sino que también ayudó a consolidar la imagen del Centro Histórico de Mérida y el entorno del Convento de San Bernardino de Siena de la Calzada en Valladolid.
Además del turismo, IDIMSA también ha contribuido a mejorar la puerta entrada a la Península de Yucatán al construir el almacén fiscalizado en la terminal remota, dentro del recinto portuario de Progreso, Yucatán.
Por tal motivo, de cara a sus 25 años IDIMSA demuestra su misión de generar un impacto positivo en la sociedad con obras que sean trascendentales. Podemos hacer realidad cualquier idea, con ingeniería de vanguardia.